Orsted no acaba de remontar, aunque le va mejor que a Vestas en el primer semestre
Orsted no acaba de remontar, meses después de vivir un gran desastre en la eólica marina (el negocio más relevante a nivel de ingresos), anunciar 800 despidos y recorte de gastos, suspender dividendo hasta 2025, reajustar objetivos, marcharse de varios países (España, Portugal, Noruega y Francia) y vender su negocio solar y eólico terrestre a Engie. Y es que en el primer semestre, los ingresos han bajado y el beneficio neto se ha desplomado un 69,6%, pese a menores costes.
La energética danesa, propiedad al 50,1% del gobierno de Copenhague, ha ingresado 4.448 millones de euros, un 17,6% menos. En esto ha influido el descenso del 9,2% en la división de eólica marina, a 3.419 millones; y la caída del 33% en el negocio de bioenergía y otro tipo de fuentes, a 1.017 millones; que no han podido compensarse con el ligero incremento en eólica terrestre (+1,4%, a 12,9 millones), el cual ha sido vendido, junto al solar, a la energética francesa Engie.
Mantiene su previsión anual de ebitda y mejora las estimaciones de eólica marina, aunque revisa a la baja la cifra de inversiones brutas
Por su parte, los costes operativos han bajado un 29,8%, a 2.698 millones, lo que refleja que ya han empezado a dar fruto algunas medidas adoptadas, como los despidos, el recorte de gastos, las salidas de algunos países y la venta del negocio solar y eólico terrestre. Y el beneficio neto se ha desplomado un 69,6%, a 90,3 millones. Eso sí, al menos, este resultado es mucho mejor que el obtenido por su compatriota Vestas, que ha tenido unas pérdidas de 231 millones, un 133% superiores a las de hace un año. Pero ojo, porque la deuda neta ha crecido, alcanzando los 4.279,70 millones.
En las cifras semestrales de Orsted se ha notado el impacto del segundo trimestre, en el que registró unos números rojos de 230,1 millones, un 188% superiores a los de hace un año, frente a los 350 millones que ganó entre enero y marzo. Eso sí, en el segundo trimestre, los ingresos han ascendido un 3,1%, a 2.013 millones. Además, ha mantenido su previsión anual de resultado bruto de explotación (ebitda), aunque ha mejorado las estimaciones de eólica marina y ha revisado a la baja la cifra de inversiones brutas... quizá para controlar un poco el aumento de la deuda.