A The Walt Disney Company no le va bien tanta progresía, adoctrinamiento de menores (algo que el líder de Vox, Santiago Abascal, llama “corrupción de menores”), ideología de género y falta de ideas en sus contenidos. Y es que acumula una caída en bolsa del 10,6% en el último mes, tras bajar un 5% en los últimos cinco días, en los cuales se ha conocido que ha tenido unas pérdidas de 18,5 millones de euros en su segundo trimestre fiscal (enero a marzo), pese a mejorar en streaming, su actual talón de Aquiles.

El gigante con sede en Burbank (California, EEUU) no sólo ha tenido pérdidas, sino que los ingresos han tenido un ligero aumento del 1,2%, a 20.502 millones. Por negocios, el de entretenimiento (incluye la división de películas que se estrenan en cine y streaming) ha aportado 9.094 millones, un 5% menos; el de experiencias (incluye los parques temáticos), 7.792 millones (+10%); y el de deportes, 4.003 millones (+2%).

Las plataformas de 'streaming' Disney+ y Hulu logran su primer resultado operativo positivo (44 millones), gracias a la subida de tarifas y suscriptores... tras el fin de las cuentas compartidas, mayores ingresos publicitarios (otro ladrón de anuncios a la prensa, como Google, Facebook y Amazon, entre otros) y menores costes

Volvamos a las pérdidas trimestrales de 18,5 millones. Es cierto que la cifra no es muy grande, pero sí cobra una mayor relevancia si se compara con los 1.180 millones de beneficio obtenidos hace un año. ¿El motivo? Un cargo de 1.905 millones por deterioros del fondo de comercio debido a Star India y la cadena televisión convencional: recuerden que dejó de emitir partidos de la liga nacional de críquet, tras perder los derechos de retransmisión hace casi un año, y que el pasado febrero anunció la creación de una sociedad conjunta en India con Reliance Industries y Viacom 18 Media al combinar los negocios de esta última y de Star India.

El resultado operativo de la factoría de Mickey Mouse ha crecido un 17%, a 3.570 millones. Dentro de esta magnitud financiera, destaca el fuerte aumento en el área de entretenimiento (+72%, a 725 millones). En esta última cifra la mayor parte procede del negocio de televisión convencional (698 millones, un 22% menos); y las plataformas de streaming Disney+ y Hulu han contribuido con su primer resultado operativo positivo (44 millones, lejísimos de los números rojos de 544 millones de hace un año), gracias a la subida de tarifas y suscriptores (recuerden que puso fin a las cuentas compartidas), así como a los mayores ingresos publicitarios (Disney también pertenece al grupo de ladrones de anuncios a la prensa, como Google, Facebook y Amazon, entre otros) y los menores costes.

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Eso sí, al sumar las cifras de ESPN+ a las de Disney+ y Hulu, el negocio total de streaming sigue sin ser rentable, porque ha tenido unas pérdidas operativas de 16,7 millones, aunque son muy inferiores a las de hace un año (-612 millones). Y ojo, porque el gigante de ocio y entretenimiento que lidera Bob Iger advierte que el streaming tendrá cifras más suaves en su tercer trimestre fiscal (abril a junio), pero mantiene la previsión de que alcance la rentabilidad en el cuarto (julio a septiembre) y tenga más mejora en el año fiscal 2025... y de hecho, ante la elevada competencia, Disney se unirá a Warner Bros. Discovery para lanzar una suscripción conjunta (que incluye Disney+, Hulu y Max), por ahora, sólo en EEUU. Por su parte, el resultado operativo de la división de experiencias ha aumentado un 12%, a 2.122 millones; mientras el de deportes ha descendido un 2%, a 722 millones. 

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En el conjunto del primer semestre fiscal (octubre a marzo), Disney ha visto estancados sus ingresos (42.365 millones, un 0,7% más) y ha reducido su beneficio neto un 25,85; a 1.756 millones. 

Respecto a los contenidos, entre enero y marzo, no ha habido demasiada polémica, aunque ha elegido a una activista LGTB para dirigir la nueva serie de Star Wars y ha mostrado un personaje no binario en X-Men. La factoría de Mickey Mouse continúa adoleciendo de falta de ideas y estirando aún más la famosa saga de la guerra de las galaxias y el mundo de los superhéroes, eso sí, limitará las películas y series de Marvel a dos o tres cada año, aunque hará un reboot (reinicio) de la saga El corredor del laberinto, y cesará Star+, pasando las suscripciones de Star+ y Combo+ a Disney+.