Recuerden que en los últimos años, el grupo automovilístico alemán Daimler se dividió en dos compañías: por un lado, una de coches y furgonetas (Mercedes-Benz) y por otro, una de camiones y autobuses (Daimler Truck). Esta última ha dado a conocer sus resultados del primer trimestre, pero ha recibido castigo bursátil (su cotización baja un 4,4%) por la ralentización de pedidos, a pesar de ganar casi el triple y de elevar ingresos y ventas.

Al hilo de esto, cabe referir que Daimler Truck vale mucho menos que su hermana: su acción está en 28,04 euros y su capitalización asciende a 23.080 millones de euros, frente a los 66,93 euros de cotización y los 99.140 millones que vale Mercedes-Benz. El descenso de este martes obedece a la ralentización de pedidos, que ha sido del 11%, a 112.935, sobre todo por el descenso en Norteamérica y Europa, pero en la conferencia telefónica con analistas, el director financiero, Jochen Goetz, ha subrayado que siguen teniendo una cartera de pedidos sólida y que tenían todo vendido para este año.

Vayamos a los resultados del primer trimestre. Daimler Truck ha tenido un beneficio neto de 795 millones de euros, que casi triplica el de hace un año y supera el previsto. El beneficio operativo (ebit) se ha disparado un 143%, a 1.121 millones, aunque el beneficio antes de impuestos ha caído un 73%, a 459 millones. Por su parte, los ingresos han aumentado un 25%, a 13.200 millones, gracias a la estabilización de las cadenas de suministro, las mayores ventas (+15%, a 125.172 unidades) y los mayores precios... que están ayudando a amortiguar el incremento de costes. De cara al resto del año, mantiene sus previsiones de crecimientos en ventas, ingresos, ebit y rentabilidad sobre ventas, a pesar de que la elevada inflación y las políticas monetarias restrictivas de los bancos centrales tendrán “un efecto moderado sobre el gasto de consumo e inversión”.