El sector del automóvil atraviesa una profunda crisis, que se ha visto avivada por la que ha causado el coronavirus, y en España, donde el sector supone el 11% del PIB y el 60% de la industria, se está notando bastante, sobre todo, en ventas. Sin embargo, la producción de coches tampoco está para tirar cohetes, teniendo en cuenta el parón durante parte del primer estado de alarma y su vuelta al ralentí: cerrará el año con una caída del 19%, hasta 2,28 millones de unidades, como prevé la Asociación Nacional de Fabricante de Automóviles y Camiones (Anfac), aunque algunos tienen razones para sonreír: la planta de Vigo (perteneciente a PSA) ha desbancado a la de Martorell (Seat) y pasa a liderar el ranking de las fábricas españolas.

En concreto, el grupo automovilístico francés, que tiene más cerca su fusión con Fiat Chrysler Automobiles (FCA), ha fabricado 497.000 coches en Vigo este año, lo que supone un 22% más que en 2019 y el segundo mejor dato de su historia. Le sigue su fábrica de Figueruelas (Zaragoza), con 390.000 vehículos (-17%), y en tercera posición, está la de Seat, situada en Martorell y que desde el 1 de enero dirigirá Christian Friedl: ha pasado de un volumen de 500.005 coches a uno de 350.000 (-30%) y acaba de anunciar un nuevo ERTE desde el 25 de enero y hasta abril por la escasez global de semiconductores.

Pero la producción no es el único indicador que ha caído en los grupos automovilísticos, también lo han hecho los beneficios, los ingresos y las ventas, sobre todo, por culpa del coronavirus

Tras estas, se colocan: la planta de Volkswagen situada en Navarra, con 247.000 unidades (-22%); y la de Ford en Almusafes, con 235.000 unidades (-32%). Por debajo de 200.000 coches fabricados están: las de Renault en Valladolid, con 191.000 (-19,5%), y en Palencia, con 151.000 (-40%); y la de Mercedes-Benz en Vitoria, con 125.000 furgonetas. Y con cifras de menos dígitos, se han situado: la tercera fábrica que PSA tiene en España -la de Madrid, que hará el último modelo de Citroën-, con 28.000 vehículos (-46%); y la de Nissan en Barcelona, con 17.000 vehículos (-80%) y que ha anunciado su cierre para dentro de un año. Además, están las que producen camiones de Iveco, que pertenece al grupo italiano CNH Industrial, situadas en Madrid y Valladolid.

Pero la producción no es el único indicador que ha caído en los grupos automovilísticos, también lo han hecho los beneficios, los ingresos y las ventas, sobre todo, por culpa del coronavirus. El grupo alemán Volkswagen ha reducido sus ganancias un 87%, a 1.382 millones de euros, en los nueve primeros meses, y sus ingresos han sido de 155.48 millones (-16,7%), pero se mantiene líder en ventas. En facturación le sigue su compatriota Daimler (dueño de Mercedes-Benz, entre otras marcas) con 420 millones de beneficio (-85%) y facturando 107.688 millones (-14%) hasta septiembre. Ford ha visto caer sus ingresos en ese mismo periodo un 21,5%, a 76.903 millones, y a algo más de distancia se han colocado los grupos franceses PSA, con 40.573 millones (-24,8%), y Renault, con 28.799 millones (-26,8%), que el próximo 14 de enero presentará su nuevo plan estratégico denominado ‘Renaulution’.

Esperemos que 2021 traiga mejores noticias para el sector del automóvil por su importancia en España.