En Renault, el CEO, Luca de Meo, ha empezado a meter tijera, también en España: quiere bajar costes salariales, aumentar la jornada anual y mayor flexibilidad de la plantilla, propuestas que se han planteado en el inicio de la negociación del nuevo convenio colectivo. Y tiene razones, pues este viernes ha anunciado que en los nueve primeros meses la cifra de negocio ha caído un 26,8%, hasta 28.799 millones, algo menos que en el primer semestre (-34,3%), pero no se sabe cómo ha evolucionado el resultado (recuerden que entre enero y junio, tuvo pérdidas de 7.386 millones).

Son los primeros números con De Meo como CEO (silla que ocupa desde el 1 de julio), donde ha habido una mejora en el tercer trimestre, donde facturó 10.374 millones (-8,2%). “Cabe destacar la evolución de nuestra política comercial, que ahora privilegia la rentabilidad frente a los volúmenes. Los resultados que hemos conseguido con los vehículos eléctricos, la excelente acogida de nuestros modelos híbridos E-TECH, nuestras reservas de liquidez (de 15.200 millones en la división de automóviles, gracias, en parte, al crédito del Gobierno francés) y la dinámica positiva de nuestros equipos nos hacen tener confianza en la capacidad del grupo para iniciar su recuperación”, ha afirmado el directivo italiano.

La política comercial de Luca de Meo es privilegiar la rentabilidad frente a los vólumenes y ha experimentado una buena evolución entre julio y septiembre

El grupo automovilístico francés ha vendido 2,06 millones de vehículos (-26%) hasta septiembre, a pesar de la mejora en el tercer trimestre y la rápida recuperación de Turquía (+131%), frente a la crisis en Brasil (-50,9%). En concreto, 806.320 (-6,1%) corresponden al tercer trimestre y de estos, casi la mitad se han vendido en Europa (405.223), donde ha tenido mejor comportamiento que el mercado (-2,9% ante un -5%), sobre todo en septiembre (+8% frente a un +3%). Eso sí, Renault se ha podido reforzar como líder en eléctricos, gracias al ZOE en Europa con más de 27.000 unidades vendidas entre julio y septiembre, un 157,4% más.

Volviendo a España, Renault ha propuesto reducir costes salariales, entre ellos, un 15% los plueses de nocturnidad, festivo y turnicidad en rotación a dos turnos. Asimismo, ha planteado aumentar la jornada anual de 217 días a 220, más tres días de competitividad y consolidar días de antigüedad sin generar nuevos derechos. Y es que tras las cifras semestrales del grupo, De Meo ya anunció que elevará la reducción de costes de 2.000 millones que se anunció en mayo vía recortes de 14.600 empleos: en ese momento, nuestro país quedó a salvo de la reducción de capacidad productiva y ahora, aunque las plantas de Valladolid y Palencia ya trabajan a muy buen ritmo (producen 1.100 y 900 coches diarios, con tres y dos turnos, respectivamente), podrían tener ajustes. Paralelamente, recuerden que De Meo acaba de presentar la ‘renault-ution’, con la que aspira a lograr recuperarse de la crisis.