Una vez más, en Hispanidad toca referir la burbuja especulativa con energías renovables que hay en España, que sigue creciendo y es doble: por un lado, muchas compañías del sector cotizan en bolsa con sonoras alzas y caídas, y por otro, hay operaciones de compra y venta donde aparecen fondos y energéticas extranjeras. Y hasta el gobernador de Banco de España, Pablo Hernández de Cos, advirtió de “burbujas verdes” hace unos meses. Ahora dicha burbuja vuelve a quedar patente con los resultados de Audax, Opdenergy, Soltec y Solaria, y su acogida por los inversores: esta última ha recibido aplauso bursátil (su cotización sube un 6,7% y ha cerrado con un alza del 7,63% siendo la mayor dentro del Ibex) tras disparar beneficio neto, resultado bruto de explotación (ebitda) e ingresos.

Solaria es líder en desarrollo y generación solar fotovoltaica de Europa, se fundó en el año 2002 y su sede está en Madrid. Su principal accionista es la familia Díaz-Tejeiro, a través de DTL Corporación SL, controlando un 34,91% del capital, una posición que ha bajado ligeramente desde el 39,96% que poseía a principios del pasado julio. Tras esta familia, en el accionariado se encuentran muchos fondos de inversión: BlackRock, el colonizador del Ibex, con un 4,542%; DWS Investment, la gestora de activos del banco alemán Deutsche Bank, con un 3,326%; Norges Bank, gestor del fondo soberano de Noruega, con un 3,176%; Amundi, empresa francesa de gestión de activos, con un 3,071%; Mirova, filial del banco corporativo y de inversión francés Natixis, con un 3,001%; ZP Master Utility Fund -operado por Zimmer Partners-, con un 2,166%; y la gestora de inversión independiente Invesco, con un 2,149%.

Solaria presume de que “goza de una excelente situación financiera”, tiene un coste medio de su deuda muy competitivo del 3% y que la subida de los tipos de interés no le daña porque el 85% de su deuda está a tipo fijo

 

Enrique Díaz-Tejeiro, presidente de Solaria y su principal accionista a través de DTL Corporación

Volvamos a los resultados que han provocado que Solaria haya subido su cotización un 6,7%. El beneficio neto se ha disparado un 86%, a 69,69 millones de euros, en los nueve primeros meses. El ebitda ha ascendido a 109,01 millones (+56%) y el beneficio operativo (ebit), ha 91,41 millones (+64%). Por su parte, los ingresos han crecido un 51%, a 120,96 millones; y los gastos de personal han subido, pasando de 5,7 millones a 8 millones, mientras otros gastos de explotación han bajado de 4,47 millones a 3,93 millones.

Solaria presume de que “goza de una excelente situación financiera”, tiene un coste medio de su deuda muy competitivo del 3% y que la subida de los tipos de interés no le daña porque el 85% de su deuda está a tipo fijo. Hace unos días ha firmado un acuerdo de financiación de 134 millones con el Banco Sabadell para construir 285 megavatios (MW) de proyectos renovables en Castilla y León, que se suma al mayor acuerdo de financiación por 372 millones que firmó a principios de julio con el banco neerlandés ABN Amro, el alemán Commerzbank y el Banco Europeo de Inversiones (BEI) para seguir creciendo. Asimismo, en las últimas semanas, se ha asegurado una nueva capacidad de 1.200 MW. “Seguimos consolidando la compañía, año tras año, gracias al aumento exponencial de nuestros resultados y al fuerte crecimiento de nuestros activos en operación y construcción que ya es de 2 GW. Seguimos invirtiendo y apostando por un futuro en el que el modelo energético sea renovable y libre de gases contaminantes. Es un orgullo poder decir que ya contamos con 8 GW de capacidad asegurada en España, el equivalente al 132% de nuestro objetivo de 6,2 GW para 2025”, ha señalado su presidente, Enrique Díaz-Tejeiro