Tras los resultados de la primera vuelta de las primarias del PP, todo es posible hasta la celebración del Congreso Nacional Extraordinario de los días 20 y 21 de julio. Sin embargo, algunos no quieren dejar nada al azar y desean llegar con una lista de unidad, entre ellos, Mariano Rajoy, que presiona a Pablo Casado para que se rinda.

He aquí el gran enigma de la derecha española: ¿por qué el expresidente apoya a Soraya Sáenz de Santamaría? Actitud que nadie entiende y una pregunta que por ahora, no tiene respuesta, pero que irremediablemente lleva a hacerse otras: ¿Tantos cadáveres tiene escondidos en el armario? Y ya puestos, ¿qué papel está jugando el director del CNI, el general Félix Sanz Roldán? Además, hace que se vuelva a pensar en la guerra de dosieres.

Nadie entiende la actitud de Rajoy: ¿tantos 'cadáveres' tiene escondidos? o ¿qué papel está jugando el general Félix Sanz Roldán (CNI)? 

Soraya ha ofrecido a Casado una candidatura única, pero él, por el momento, opta por terminar la carrera, pues “no hemos llegado hasta aquí para que nada cambie”, ha afirmado. De ahí, que proponga un frente común para vencer a la exvicepresidenta y haya contactado con los precandidatos derrotados (Mª Dolores de Cospedal, José Manuel García-Margallo, José Ramón García Hernández y Elio Cabanes) y les haya ofrecido unirse a su lista. También está hablando con los líderes territoriales para explicarles que su candidatura garantiza la unidad del partido y tiene pensado hablar con todos los compromisarios elegidos.

Como saben, el aparato del PP va con Cospedal y ella está dispuesta a unirse con Casado. Todo depende de si son capaces de aguantar la presión y de lo que Soraya pueda forzar la máquina: no sería de extrañar que llegara un horizonte penal para Casado por su famoso máster… antes del Congreso Nacional Extraordinario del PP. Además, no podemos olvidar que el PSOE quiere a la frívola y superficial Soraya.

Esperanza Aguirre deja entrever el juego sucio contra Casado: tengo noticias de que ha habido presiones en Andalucía

Al mismo tiempo, cabe hablar de juego sucio contra Casado, sobre todo, en Andalucía. De hecho, iba ganando en el recuento, hasta que los votos de dicha autonomía dieron la victoria a Soraya. ¿Los artífices? Javier Arenas y Juan Manuel Moreno, quienes tenían órdenes de Rajoy de apoyar a la exvicepresidenta. Un juego sucio que ha dejado entrever Esperanza Aguirre, que fue quien aupó a Casado a la política, en su entrevista en Al rojo vivo: “Tengo noticias de que ha habido presiones en Andalucía aunque no las puedo probar”, ha señalado, añadiendo que “tanto Arenas como Juanma Moreno, acuciados por las próximas elecciones en Andalucía, tenían la necesidad de ser ellos los que estuvieran al mando del partido”.

Soraya tiene de su lado a los exministros (sobre todo, a Íñigo Méndez de Vigo, Fátima Báñez, Íñigo de la Serna y Álvaro Nadal, e incluso se habla de Cristóbal Montoro), pero también al matrimonio Arriola-Villalobos (formado por Pedro Arriola y la diputada Celia Villalobos) que se juegan sus puestos y su facturación en el partido. Pero, al mismo tiempo, hay otros apoyos algo disimulados: la presidente del PP valenciano, Isabel Bonig, ha afirmado que si hay que ir a una lista única, lo mejor es que vaya la más votada; y el coordinador general del PP, Fernando Martínez Maíllo, que sigue las órdenes de Rajoy, ha señalado que “en política, uno más uno no son dos”. O sea, Casado, ríndete.

Eso sí, Esperanza Aguirre recuerda que "sólo debe gobernar el más votado cuando se va a una vuelta, no cuando hay dos".