Remontémonos al mes de noviembre,  a la feria inmobiliaria The District en Barcelona, una iniciativa dirigida a poner a la Ciudad Condal en el centro de las inversiones internacionales, tras la pérdida de relevancia que ha sufrido la ciudad en estos últimos años. 

En la inauguración, un grupo de activistas atacaron a varios asistentes, rociándoles con pintura y asaltando los pabellones donde se realizaba el evento, lo que provocó que la apertura tuviera que retrasarse una hora. 

Uno de los afectados por el 'baño' de pintura de los amables activistas amigos de Ada fue el CEO de Merlin Properties, Ismael Clemente, le arrojan encima material naranja con lo que le estropean el traje y la mochila: "¿A la perroflauta le pega usted la bofetada usted o se la pego yo?", le preguntó Clemente a la policía allí presente: su respuesta dejó en evidencia la impunidad con la que cuentan. 

Ada, lejos de condenar los hechos, aseguró que "comparte la preocupación porque los fondos buitre se encuentren en Barcelona". Y este se lo permite cuando Barcelona se ha convertido en un caos constante desde que ella es alcaldesa: a ser líderes en okupación, se suma el incremento de la delincuencia y el aumento del consumo de drogas. 

Ahora Clemente ha tenido una nueva oportunidad para retratar la situación que vive la ciudad y no la ha dejado pasar, criticando en un coloquio en el Círculo Ecuestre en Barcelona que la ciudad: "es un Ferrari al que le han quitado los cilindros". Y continuó aseverando que tanto Barcelona como Catalunya "se han imaginado enemigos para ponerse una excusa y no salir adelante".

El CEO de Merlin también habló sobre la subida del precio del alquiler en España, defendiendo que "la oferta pública podría haber reequilibrado la subida de los alquileres, pero la administración pública no ha estado a la altura". 

Pobre Ada, siempre es víctima de acosos.