La media de calificaciones en el conjunto de España en 2021 fue del 6,5%, con un volumen de sobresalientes que superaba con creces el de los años anteriores a consecuencia de la flexibilización de las reglas
Lo explica mejor que bien The Objective: desde el cambio de normas que tuvo lugar a raíz de la pandemia de coronavirus ya no hay dos modelos de examen de Selectividad, el lado A y el lado B, sino que existe un único examen con ocho preguntas y los alumnos pueden escoger las cuatro que quieran.
La duración de cada prueba es de 90 minutos, con media hora de descanso entre ellas y, en ningún caso, se podrán hacer más del 50% de preguntas tipo test. De esta manera se garantiza que pueda darse una parte de desarrollo en el examen. Es decir, se observa una clara flexibilización de las normas. Pues bien, como resultado se han disparado un 13% los aprobados en Selectividad y un 85% los sobresalientes.
Sin embargo, a pesar de estos cambios, la EBAU sigue manteniendo algunas de sus bases. Así, los estudiantes se examinarán de asignaturas troncales y aquellos que lo deseen, podrán presentarse a convocatorias de asignaturas optativas para subir nota. De la misma manera, la calificación final se sigue calculando de la misma manera: 60% la nota de Bachillerato y 40% la nota media de los exámenes de Selectividad, siempre que se haya obtenido más de un 4.
The Objective señala que todo ello ha contribuido a aumentar la diferencia de notas medias entre las diferentes autonomías mientras el porcentaje de aprobados se ha reducido entre algunos territorios. En este contexto, comunidades como País Vasco, Castilla y León, Aragón o Navarra se convirtieron en las regiones con mayor porcentaje de aprobados en las pruebas de selectividad de 2021, mientras Madrid, Andalucía o Galicia se sitúan entre los autonomías con menor número de aprobados.
La diferencia entre la nota media de los aprobados procedentes de Bachillerato ha aumentado también de forma notable. Las cinco comunidades con mejores calificaciones en 2021 fueron: País Vasco, Castilla y León, Cantabria y Murcia –con un 7,2 –, así como Asturias, donde la media se sitúa en un 7,1. En el otro extremo, los territorios con calificaciones medias más bajas fueron Baleares (6,2), Galicia (6,6), Madrid, (6,7), Comunidad Valenciana y Canarias (6,8).
La media de calificaciones en el conjunto de España en 2021 fue del 6,5%, con un volumen de sobresalientes que superaba con creces el de los años anteriores a consecuencia de la flexibilización de las reglas.
Se cumple así la promoción de la vagancia hacia la que camina a pasos agigantados el Gobierno Sánchez. No olviden el pensamiento Celaá: si los alumnos repiten mucho... pues suprimimos las repeticiones. Pedir más esfuerzo no es progresista.