La ministra de Educación y Formación Profesional, Isabel Celaá, ha defendido el decreto que permite pasar de curso y obtener los títulos de ESO y Bachillerato sin límite de suspensos y ha asegurado que “el sistema español es abusivo con las repeticiones”, ergo -pensamiento Celaá- quitamos las repeticiones. En dicho popular: muerto el perro, se acabó la rabia.

En relación a las reticencias de algunas comunidades autónomas a aplicar el decreto que se debate este jueves en el Congreso, la ministra ha precisado que “la lectura que hacen algunos es incorrecta” y ha confrontado los datos de alumnos repetidores en países de la OCDE donde la media es del 11 por ciento, frente al 29 por ciento en España. Lo dicho,  si el índice de repetidores es muy alto, soluciones Celaá: no más repeticiones. 

Según La Razón, Celaá ha explicado, en una entrevista en RNE recogida por Europa Preess, que “mandar a un estudiante a repetición es una decisión muy seria, que afecta al alumno y al sistema” -¿será porque el sistema de este Gobierno sociopodemita quiere alumnos cada vez menos formados y más perezosos?- y se ha mostrado convencida de que “cuando un alumno no ha aprendido, no es cuestión de que necesite más tiempo para aprender, sino que el profesor identifique qué es lo que no ha aprendido y refuerce”.

La ministra ha precisado, no obstante, que “eso no quiere decir que alumnos con suspenso hayan de pasar, sino que la mirada mas importante está en la evaluación de la evolución global de ese estudiante; es un paso en calidad que exige más esfuerzo al sistema y al alumno”. Es decir que si el alumno tiene pongamos 3 suspensos en cada evaluación, aplicamos la evolución global de Celaá y como con 3 suspensos por 3 evaluaciones el estudiante tendría 9 suspensos en total eso significaría -pensamiento Celaá- que el alumno se ha esforzado mucho para mantener esos suspensos y el sistema también, para que el estudiante los mantenga. Isabel ¡qué grande eres!