Sr. Director:

Creo que hoy empezaba el debate de la LOE, asunto lamentablemente eclipsado por las pasiones incendiarias que provoca el Estatuto de Cataluña ya que, a mi juicio, con la ley de educación nos estamos jugando algo de mucha más trascendencia social.  Derogaron en la práctica una ley orgánica la LOCE- alegando que no había sido suficientemente consensuada pero dudo que recibiera más contestación que la que proponen, que  no contenta a nadie: ni a padres,  ni a profesores ni a la patronal de los centros privados y, lo que es peor, seguirá perpetuando la condena del alumnado al marasmo intelectual, al empobrecimiento y mediocridad más penosos sin ir a la raíz de los problemas más acuciantes. Insiste en el sistema de la escuela comprensiva cuando los principales países europeos lo han abandonado por los estragos que ha causado. Los alumnos que no quieren estudiar no salen mejor preparados por mucho que estén escolarizados obligatoriamente hasta los 18 años, lo que hacen es exasperar a padres y profesores que no pueden realizar su tarea en paz con el consiguiente perjuicio de los alumnos que podrían sacar mejor rendimiento.

Por otro lado, no se entiende ese empeño de algunos (a no ser por prejuicios ideológicos) en que la educación nos salga más cara a TODOS los españoles, que eso es lo que pasaría si siguen asfixiando a la privada. Al Estado le sale más barata la concertada el gasto por alumno en la privada es menos de la mitad que en la pública- por lo que, si se retiraran los conciertos y parte de ese alumnado lo tuviese que absorber la pública, los presupuestos tendrían que aumentar alrededor de un 10% sin que por ello aumentase el gasto por alumno.  Sí que entiendo que los padres que ya pagan por partida doble la pública con sus impuestos y la privada si deciden llevar a sus hijos a ella- se vayan despertando.

Sonsoles Peñacoba Muñoz-Chápuli

sonsoless@auna.com