La profesora se negó a reconocer sus demandas y continuó sin llamarlas por los pronombres que ellas habían elegido, en cambio, usó el femenino, argumentando que si alguna alumna deseaba que se le asignara un pronombre distintos al de su sexo biológico, tendría que consultarlo primero con los padres
En Hispanidad publicamos el caso de Kluge, un profesor que se negó a llamar a dos estudiantes por sus nombres y pronombres transgénero, lo que le costó el puesto de trabajo o el de un profesor cristiano encarcelado por negarse a usar pronombres trans porque suponían una “violación de su conciencia”. O, el de Peter Vlaming, quien enseñó francés en el distrito escolar de West Point en Virginia durante siete años, fue suspendido y posteriormente despedido en 2018 por no usar un pronombre masculino para referirse a una estudiante que se identificó como un hombre transgénero. Vlaming afirmó que no podía hacerlo por razones religiosas.
Ahora conocemos el caso de una maestra en Reino Unido a la que han obligado a disculparse con las alumnas de un colegio femenino por decirles 'Buenas tardes, chicas'. Los hechos ocurrieron al comienzo de un día de clase, cuando la profesora saludó al aula refiriéndose a todas las presentes como chicas, un grupo de alumnas le dijeron que "no todos se identifican como mujeres". La cosa parecía que podía quedar ahí, pero al día siguiente cuando volvió a la clase descubrió que las alumnas habían escrito sus nombres y pronombres en la pizarra.
La profesora se negó a reconocer sus demandas y continuó sin llamarlas por los pronombres que ellas habían elegido, en cambio, usó el femenino, argumentando que si alguna alumna deseaba que se le asignara un pronombre distinto al de su sexo biológico, tendría que consultarlo primero con los padres, lo que hizo que la clase elevara una propuesta. La profesora reconoce que el personal del centro parecía estar del lado de las alumnas: "hicieron pancartas con lemas como 'Las vidas trans importan'".
La profesora, de filosofía y educación religiosa, ha hablado con la dirección y ha reconocido que se siente "humillada" porque le hayan hecho disculparse con niñas de 11 años en una escuela privada para niñas, por llamarlas niñas: "Antes del final de la semana estaba en algún tipo de proceso disciplinario y el director me decía que tenía que disculparme con las chicas".
Cuenta que la disculpa la tuvo que realizar al lado del director, quien habló en su nombre y aseguró que "nadie querría lastimarlos y que todos los amamos", "Lamento que estés molesto y no quisimos ofenderte. Siento que te sintieras mal". Aseguró que todo fue bastante humillante y vergonzoso, es más, ha reconocido que le han comunicado que, una vez finalice este curso, no podrá permanecer en la escuela.
Se trata del Girls' Day School Trust, un grupo de 25 escuelas y academias, que ya desató la polémica en enero de 2022 al actualizar su política de identidad de género para prohibir las solicitudes de estudiantes que son legalmente hombres pero se identifican como trans o no binarios con el fin de proteger el estatus de la escuela como colegio de solo un sexo.