"Esto lo hace un dictador, no de un presidente", asegura el gobernador de california, el demócrata y aspirante a la Casa Blanca, Gavin Newson. Se refiera a los enfrentamientos entre la Guardia Nacional, enviada por Trump, y los que protestan contra las deportaciones de inmigrantes ilegales, decretadas por el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump.
Se deporta a aquel que ha entrado ilegalmente en Estados Unidos y que se niega a aceptar la subvención gubernamental para volver a su país.
Ergo, lo que está haciendo Trump es aplicar la ley. Para entendernos, según Newson, un dictador es aquel que hace cumplir la ley y un demócrata el que la incumple o permite que se incumpla.
🚨 Un hombre con una bandera mexicana rodea un carro en llamas durante los disturbios antiICE en Los Ángeles, mientras el presidente Trump exige a los líderes demócratas que controlen la situación en California.pic.twitter.com/FZjN9b88O6
— Emmanuel Rincón (@EmmaRincon) June 8, 2025
Luego está el apartado sentimental, que lo borda doña Cristina Olea, corresponsal de RTVE en Washington, especialista en atacar a Trump, por lo que hace y por lo que no hace: "Hay muchos niños asustados, preocupados porque sus padres puedan ser detenidos en el trabajo ". Sí, uno comprende que un niño pueda preocuparse por ello, pero a lo mejor lo que se nos quiere e insinuar es que al hijo de un homicida, pongamos un varón que mata a su mujer, no debe ser detenido porque su hijo podría sufrir mucho.
En definitiva, puede decirse que las deportaciones de Trump son como echar una gota de agua en el mar. Puede decirse, también que es esa desesperación es la que les ha llevado a entrar en Estados Unidos de forma ilegal y que hay que intentar que se integren, trabajen duro y se conviertan en legales.