Mientras en Estados Unidos el precio oficial del dinero alcanza el 4%, el Banco Central Europeo ha decidido, mañana del jueves, mantener los tipos de interés en el 2%, a pesar de las tensiones inflacionistas que sufren algunos países, entre ellos España.
Dicho de otra forma, el presidente del organismo, Jean Claude Trichet, no acaba de creer en la paulatina, lentísima, recuperación económica europea, especialmente de la locomotora alemana y del primer vagón francés. Por ello, prefiere mantener unos tipos artificialmente bajos.