La orden ya ha sido dada. A Juan Luis Cebrián no se le insulta impunemente. La concesión de la TDT de pago antes de que PRISA arregle sus cuentas ha sentado muy mal en El País. Y como buen ejército disciplinado, se disponen a golpear, por tierra, mar y aire es decir, por prensa radio y TV, (por El País, Ser y Cuatro) al Ejecutivo Zapatero.
De igual modo que en su momento descabalgaron a Carme Chacón como sucesora, a costa de resaltar las meteduras de pata de la ministra, ahora la idea es resaltar los escándalos de corrupción de alcaldes socialistas -no con la misma inquina que los casos donde están involucrados gente del PP, naturalmente- y el descontento cada vez más generalizado de la población con los inmigrantes más favorecidos por las prestaciones públicas que los españoles impecunes- y con la inseguridad ciudadana.
Lo malo es que estos dos puntos dependen de uno de los ministros favoritos de El País: Alfredo Pérez Rubalcaba. ¡Pero mira que es difícil esto de hacer política desde la prensa!