El coste de esta propuesta rondaría los 1.500 millones de euros Ante la negativa del Gobierno a crear un fondo de adquisición de activos inmobiliarios, el presidente de la patronal, José Manuel Galindo, no desfallece. La primera propuesta es que el IVA del alquiler con opción a compra no sea del 16%, sino del 7% general y 4% para vivienda protegida. En este punto ya parece haber alcanzado un acuerdo por parte del Gobierno.
Pero hay más. También propone que el Gobierno subvencione temporalmente el alquiler de viviendas. Según sus cálculos si la rentabilidad exigible a un alquiler es de un 3%, bastaría con el que el Gobierno financiase un 1% de ese 3%. Sobre 500.000 viviendas de alquiler, eso tendría un impacto cercano de 1.500 millones de euros que sobre las cifras que se están barajando es perfectamente asumible, señala Galindo.
La propuesta todavía no ha sido presentada formalmente al Gobierno. Entre otras cosas, porque la cifra de subvención podría elevarse al 1,5% o quizás aplicarse a menos viviendas. En tal caso, el coste para el Estado sería menor, quizás 500 millones de euros. Aunque no hay respuesta del Gobierno, probablemente sea nones.
En cambio, empieza a cundir la idea de la necesidad de una amnistía fiscal que permita aflorar todo el dinero negro y ganar liquidez. Es uno de los temas que están encima de la mesa, reconoce Galindo.
Pero hay más. También propone que el Gobierno subvencione temporalmente el alquiler de viviendas. Según sus cálculos si la rentabilidad exigible a un alquiler es de un 3%, bastaría con el que el Gobierno financiase un 1% de ese 3%. Sobre 500.000 viviendas de alquiler, eso tendría un impacto cercano de 1.500 millones de euros que sobre las cifras que se están barajando es perfectamente asumible, señala Galindo.
La propuesta todavía no ha sido presentada formalmente al Gobierno. Entre otras cosas, porque la cifra de subvención podría elevarse al 1,5% o quizás aplicarse a menos viviendas. En tal caso, el coste para el Estado sería menor, quizás 500 millones de euros. Aunque no hay respuesta del Gobierno, probablemente sea nones.
En cambio, empieza a cundir la idea de la necesidad de una amnistía fiscal que permita aflorar todo el dinero negro y ganar liquidez. Es uno de los temas que están encima de la mesa, reconoce Galindo.