• El pleno de la Eurocámara aprueba el presupuesto de la UE para 2015, que amplía en 4.800 millones de euros la dotación para pagar las facturas pendientes de este año.
  • La cantidad de pagos aplazados acumulados se ha disparado: ha aumentado de 5.000 millones en 2010 a más de 23.000 millones en 2014.
  • La Comisión Europea presentará un plan en 2016 para reducir hasta niveles sostenibles el número de impagados por la UE.
  • Según Pablo Echenique (Podemos), el presupuesto europeo abre la puerta "a que siga el libre comercio sin redistribución ni solidaridad, la receta perfecta para la desigualdad y para seguir abriendo la brecha entre el norte y el sur de Europa". 
El pleno del Parlamento Europeo ha aprobado hoy miércoles el presupuesto de la Unión Europea para 2015. La Eurocámara ha seguido el ejemplo de España y ha ampliado en 4.800 millones de euros la dotación para pagar las facturas pendientes de 2014, lo que es una gran ayuda para las empresas que debían cobrar de Europa.

Y es que la cantidad en facturas pendientes acumuladas ha aumentado de 5.000 millones de euros en 2010 a más de 23.000 millones en 2014, por lo que la Eurocámara ha centrado la mayor parte de su estrategia negociadora en aumentar la partida para pagos pendientes.

Así que con ese mismo objetivo, los negociadores del europarlamento pusieron otra condición para llegar a un acuerdo: que la Comisión Europea presente un plan en 2016 para reducir hasta niveles sostenibles el número de facturas impagadas por la Unión.

Pero ha habido más cosas. Los presupuestos contendrán finalmente 45 millones de euros adicionales en investigación y desarrollo y otros 16 millones de euros más para intercambio de estudiantes, como el programa Erasmus.

También se ha incrementado en 32 millones de euros la partida a política exterior y otras como las de la agencia Frontex o la de supervisión bancaria (en cantidades que aún deben ser publicadas).

El acuerdo entre los parlamentarios sitúa en 141.200 millones de euros el nivel de pagos, el monto anual máximo de desembolsos que se derivan de los compromisos actuales y pasados que deben efectuarse.

Respecto a los compromisos -el importe máximo de pagos futuros a los que se puede comprometer la Unión Europea durante un año-, éstos se cuantifican en 145.300 millones de euros.

Una de las anécdotas del día es que el eurodiputado de la comisión de Presupuestos Pablo Echenique (Podemos) consideró que estas cuentas abren la puerta "a que siga el libre comercio sin redistribución ni solidaridad, la receta perfecta para la desigualdad y para seguir abriendo la brecha entre el norte y el sur de Europa".

José Ángel Gutiérrez
joseangel@hispanidad.com