En el sector petrolero ya no tienen ninguna duda. El venezolano Hugo Chávez mantiene una alianza con los países árabes, especialmente con los más radiales, para mantener alto el precio del petróleo, lo que más puede dañar a la economía occidental. En el seno de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), era un comentario habitual las espléndidas relaciones establecidos por Alí Rodríguez, entonces presidente de la Organización, con sus colegas mahometanos, con la excepción de Arabia y Kuwait, que seguían manteniendo, y al parecer siguen, el apoyo a Estados Unidos.

 

Rodríguez dirige ahora Petróleos de Venezuela (PdVSA), precisamente la empresa que más le costó conquistar a Chávez. Y la estrategia sigue en pie: Se trata de mantener el petróleo en los 40 dólares, independientemente de los acuerdos de la OPEP.

 

Por otra parte, alrededor de Alí Rodríguez ha emergido una nueva clase de millonarios venezolanos del crudo: los oficiales del Ejército fieles a Hugo Chávez.