HOY DÍA DEL PADRE: Ésta es una carta que he escrito para el día del padre en relación con todo lo que pasó con el aborto de mi hijo
Como todas las mañanas, las puertas del vagón de metro se abrieron ante mí. Las mismas caras inexpresivas, mismas estaciones, y por supuesto la misma indiferencia colectiva. Pero esta vez aquel viejo borracho y renqueante se sentó frente a mí, mientras balbuceaba una historia que desprendía olor a alcohol. Intenté ignorarle al principio, pero su leyenda me cautivaba cada vez más a medida que avanzaba.
Con una voz ronca y dificultosa respiración, contaba al aire como en una ocasión conoció a un joven que recién había cumplido la veintena dejó embarazada a su novia. El chico quería tener ese bebé, pero su compañera, asustada, escuchando los malos consejos de quienes no iban a perder nada y quizás buscando la solución más sencilla, pidió cita en un centro donde practicaban abortos sin tener en cuenta la opinión del padre.
No pude escuchar el final de la historia, porque al llegar a su destino, Tetuán, el mendigo se marchó en cuanto las puertas se tornaron abiertas y su voz se atenuaba a la vez que avanzaba hacia la salida...
Quizás quiera recordarlo así, como una historia que una vez escuché de boca de un desconocido, pero la realidad es que hoy, 19 de Marzo y Día del padre, soy yo el que tiene como destino la misma parada de metro en la que bajó aquel trotamundos ebrio, tengo como destino dar un paseo en los aledaños de la "clínica" abortista Dátor donde por última vez estuve con mi hijo, para quizás así encontrarme más cerca de él.
Porque me entristece realmente, que en un día tan señalado como éste, la palabra del hombre a la hora de decidir sobre la vida de un hijo, sea una palabra muda, vacía, una palabra que nadie escucha, y que debería tenerse en cuenta, para que esa igualdad por la que aboga la humanidad sea una realidad y no una pantomima.
Porque de haber sido así, hoy, no sería tan solo el día de aquellos padres a los que miro con recelo y envidia, sino que probablemente, también sería el día en el que lejos de esa "clínica" de abortos, estaría celebrando mi paternidad junto a mi chica y mi bebé.
Jorge C. info@vozvictimas.org