Ya informamos que Montoro observaba la fusión de Cajastur con CCM con cierta distancia. Y es que en realidad lo que hace la caja asturiana es activar una ficha bancaria dormida para hacerse con los activos de CCM en el bien entendido de que las pérdidas de las actividades industriales y promotoras serán asumidas por el Fondo de Garantía de Depósitos hasta un máximo de 2.475 millones de euros. Vamos que deja el fondo pelado.
La nueva CCM será una especie de fundación que recibirá el 25% de los potenciales beneficios del banco, el mismo porcentaje con el que participa. De esta manera se salvan los muebles y se vende como una operación de rescate sin necesitar fondos públicos. Dos matizaciones. CCM ya ha sido intervenida y saneada con no poco dinero. Segunda: el FGD no es técnicamente dinero público, pero se le parece bastante.
Dile a los jueces y juezas... Vicente Vallés, ejerciendo de feministo
14/12/24 15:00