A pesar de este domingo no ha sido un día frío, sino todo lo contrario, ha sido un día cálido, pues miren, yo me he quedado helada al leer en el periódico El País el artículo de Juan Bedoya.
Y, es que a pesar de que ya sé cómo se las gastan, no acabo por acostumbrarme a su capacidad de desinformación.
Porque dice el señor Bedoya que el portavoz de la Conferencia Episcopal
asegura que no pedirá a Rajoy que derogue el aborto ni el matrimonio homosexual. Y habla que a nuevo gobierno, nuevo talante.
Lo siento señor Bedoya, usted, miente. Miente, porque nada ha cambiado, si hay algo que nunca cambia, es el depósito que tiene la Iglesia, "el Evangelio". 2.000 años lleva la Iglesia defendiendo los derechos del hombre y otros 2.000 se pasarían si todo siguiera igual.
Y eso es lo que hace la Iglesia orientar ya sea el PP, PSOE, UPyD o IU, gobierne quien gobierne, es lo de menos, lo que quiere la Iglesia, los obispos y los católicos es que se defiendan los valores humanos y e instituciones como la familia.
Han pasado dos mil años y en cada época siguen apareciendo personajes, dispuestos a terminar con la Iglesia, borrarla de la faz de la tierra. Y lo intentan de mil modos y maneras, convencidos cada uno de que él va a lograr
lo que ninguno antes. Y no consiguen sino vigorizarla y fortalecerla. ¡La Iglesia es perenne, porque el dedo y el poder de Dios está con su Iglesia!