La Verdadera Devoción al Corazón de Jesús
(4-VI-2004)
Jesús: ¡Mis niños, hija! ¿Cómo los perdéis? ¿Cómo los habéis perdido? ¡Qué habéis hecho! ¡Habéis asesinado sus almas! Les habéis dejado en manos del enemigo, que busca su condenación tenue y tenazmente. Sabe bien a dónde va y se toma su tiempo. Mientras vosotros, padres, dejáis a vuestros hijos en sus garras, ocupados y afanados en otros asuntos como son el quedar bien, el ganar más dinero, la calidad de vida y el estatus social. Y ante ellos sois ejemplos de vida perdida para la Gracia, del que toman fiel reflejo.