Mapfre. Presentación resultados primer semestre 2020
Hoy empiezan a llegar al regulador de bolsa las cuentas de los “pesos pesados” correspondientes al primer semestre del ejercicio, la primera que lo hace es la entidad presidida por Antonio Huertas. Reiteradamente, hemos venido advirtiendo las continuas excusas de Mapfre para no reconocer, de forma clara, que la compañía no se encuentra en sus mejores momentos. De nada vale achacar todos los males al empeoramiento de la climatología y ahora, evidentemente, también a la repercusión del COVID-19.
En el primer trimestre, no sé si les temblaron las piernas con lo que se nos venía encima o que, por fin, encontraron la excusa definitiva y cambiaron los objetivos estratégicos para el trienio 2019-2021.
Así, la previsión para el retorno de capital, que cifraban al inicio en el 10%, luego bajó hasta entre el 8 y 9%. También rebajaron sus expectativas de ingresos de 30.000 millones de euros (M€) a unos 28.000M€. No sé que harán después del verano si cae alguna tormenta fuerte por el Caribe o, como es más previsible, continuamos con el sin parar del coronavirus, golpeando la salud y la economía mundial.
Las primas se reducen un 12,4% y sube el endeudamiento
Pero vamos a los números, que están frescos. Desde hace muchos meses, las presentaciones de Huertas parecen el día de la marmota y las hojas de datos, salvo la línea de deuda… “todas con la rayita delante”.
El resultado neto atribuido ha sido de 270,7M€, que en comparación con el obtenido en 2019 resulta inferior en un 27,7%. Por áreas geográficas, los descensos son de un 4,6% en IBERIA (España y Portugal), Reaseguro y Global Risks -160,9%, Asistencia -138,8%, solo Internacional (resto países) +69,3% y LATAM (Hispanoamérica) +26,8% crecen.
Tan solo el negocio asegurador se ha dejado 155,1M€ con respecto a 2019 que registró un resultado de 825M€ y el resultado de otras actividades no aseguradoras registra una perdida de 124,9M€ frente a los -65,9M€ del 2019. Francamente, no se qué tienen que ver los terremotos con las pérdidas en otras actividades no aseguradoras, pero esta es la primera excusa para la justificación del resultado, evolucionamos de tormentas a terremotos.
Si vamos por la parte seria, las primas totales se han reducido en un 12,3% respecto a 2019, siendo la reducción del 9,7% para las primas de vida, que sólo incrementa en un 0,1% su ratio de siniestralidad, y del 21,4% para primas de no vida.
Reaseguro ha sido la más negra de las ramas de actividad, con un total de 2.123M€ en primas emitidas (-5,1%) y un resultado negativo de 48M€. Los apellidos de estas cifras COVID-19, terremotos en Puerto Rico y la tormenta Gloria en España.
Eso sí, una bolsa desesperada por encontrar rentabilidad ‘sostenible’, aplaude a Mapfre
El ratio de solvencia que nos ofrecen es el mismo del primer trimestre 177,2%, un 9,6% inferior al registrado en 2019, sólo a 2,2% de incumplir el objetivo de mantenerse dentro de la cifra del 175% y que a mí personalmente me parece muy baja para un entidad aseguradora, sobre todo por las cifras que podemos ver en otras compañías.
Los activos totales se han reducido en un 3,2% y los gestionados 60.889,9M€ son un 4,3%. Por cierto, casi olvidaba que la cifra de balance que ha crecido y de la que no nos ofrecen mucha más información, es la de la deuda, 3.068,1M€, un 3,2% superior a la del pasado ejercicio.
Y lo que le faltaba a la compañía a modo de guinda es la reciente noticia de la multa de la CNMV, 760.000 euros, por no tener creadas las perceptivas comisiones de auditoria que contempla la normativa del regulador, solo falta que le crezcan los enanos.
Yo cada vez entiendo menos a los mercados, o me he perdido algo de las cuentas de Mapfre, unos resultados realmente malos y la acción subiendo mientras el Ibex desciende. Curioso.