- La multinacional de Atlanta gana sólo 958 millones en el tercer trimestre y la cifra de negocio es de 9.741 millones.
- Números más bajos que los del periodo abril-junio: 3.135 millones y 10.490 millones (-5%).
- En los nueve primeros meses, hay signos de crisis: 5.475 millones de beneficio (-2%) y 29.732 millones (-5%) en ventas.
- Menos negocios en Europa, Oriente Próximo, África e Hispanoamérica; sólo mejora en Asia Pacífico y Norteamérica.
- Además, le acongoja el impuesto a las bebidas azucaradas, que barajan Reino Unido, la UE e incluso Cataluña, su primera casa española.
- A la 'megaembotelladora' europea tampoco le va bien, pero premia por segunda vez al español Víctor Rufart por el ERE y el cierre de fábricas.
Parece que a
Coca-Cola se le va la 'chispa', a pesar de lo mucho que le gustan los
monopolios, tal y como puede verse en sus
últimos resultados publicados. Y es que en el tercer trimestre su
beneficio neto se ha desplomado (-28%) y sus
ventas han caído más (-7%).
En concreto, la multinacional de Atlanta ha ganado sólo 958 millones de euros entre junio y septiembre, casi un tercio de lo que obtuvo en igual periodo de 2015. Mientras, su cifra de negocio se ha situado en 9.741 millones debido al impacto negativo de adquisiciones, desinversiones, elementos estructurales y
cambio de divisa.
Estos números, además, son más bajos que los del
periodo abril-junio. Entonces, el gigante de refrescos que tiene como presidente y Ceo a
Muhtar Kent (
en la imagen) presumió de un
beneficio neto de 3.135 millones ( 10,9%), aunque la cifra de negocio ya se movía a la baja (-5%), situándose en 10.490 millones.
En los nueve primeros meses del año, las cifras son peores que en primer semestre y hay signos de
crisis. La ganancia neta ha sido de 5.475 millones, un 2% menos que entre enero y septiembre de 2015, y las ventas se han situado en 29.732 millones (-5%). Claro que no hay que olvidar que sus perspectivas para cerrar el año también son bajas: prevé un avance del 3% en sus ingresos orgánicos y que su
beneficio por acción sea entre un 4% y un 7% inferior a los 2 dólares (1,83 euros) del 2015.
Todas estas cifras reflejan esa pérdida de 'chispa', pero volvamos al tercer trimestre para analizarlo más en detalle.
Las ventas en general de Coca-Cola no van bien, pues sólo suben en Asia Pacífico ( 4%) y Norteamérica ( 3%). Por el contrario, bajan un 4% en Europa (aunque no desgrana por países, con lo que nos gustaría ver los datos de España), Oriente Próximo, África (
donde también lleva su monopolio al hacerse con el embotellador más grande) e Hispanoamérica. Y un apunte curioso, en los resultados, dan cifras de las ventas en las
embotelladoras donde ha invertido (entre ellas, la
'megaembotelladora' europea, Coca-Cola European Partners) que caen un 19%.
La multinacional de Atlanta,
al igual que toda la industria del refresco, está acongojada por el
impuesto a las bebidas azucaradas. Y es que
Reino Unido ya ha anunciado que lo impondrá, aunque rebajado por las presiones de Coca-Cola; podría llegar a plantearse en la UE e incluso
la Generalitat de Cataluña -su primera casa española- lo baraja, aunque no tiene competencia.
Al mismo tiempo, a Coca-Cola le sigue preocupando y mucho la imagen de la marca y cómo llega. Este miércoles,
ha ascendido a director de información de Barry Simpson, que actualmente era el jefe de la unidad de negocios y servicios de TI (Tecnologías de la Información).
Paralelamente, conviene subrayar que a la 'megaembotelladora' europea
tampoco le va bien, pero ha premiado por segunda vez al español
Víctor Rufart por el ERE y el cierre de fábricas. El ejecutivo, considerado el hombre de confianza de
Sol Daurella (la poderosa catalana que
saca tajada de la 'chispa'), ha sido ascendido a director de estrategia de CCEP, y seguirá al frente de la oficina de integración y transformación del negocio -cargo que ocupa desde hace meses-.
Con anterioridad, Rufart era el director general del embotellador español (Coca-Cola Iberian Partners), del mismo que no tuvo reparos en hacer un
ERE con beneficios y cerrar fábricas, originando un conflicto que dura ya 33 meses, y parece que no le gusta Madrid porque en el momento más complicado llegó a decir: "O Madrid o mi cabeza".
Claro que Rufart no es el primer ejecutivo premiado por lo sucedido en España.
Marcos de Quinto es el vicepresidente y responsable mundial de marketing de Coca-Cola, Daurella preside la 'megaembotelladora' europea y
Miguel Mira ha sido nombrado director general en la región sur de México por cuidar la imagen de la marca. Y además, no se puede olvidar que la presidenta del Banco Santander,
Ana Botín, es consejera de la multinacional y su tío,
Jaime Botín, del embotellador español (actualmente integrado en CCEP). Claro que a pesar de tener su
cúpula llena de españoles y el monopolio que aquí disfruta, el gigante de Atlanta no tiene reparos en portarse mal con nuestro país. ¡Paradojas!
Cristina Martín
cristina@hispanidad.com