Talgo, bajo las riendas de Carlos de Palacio y Oriol y Gonzalo Urquijo, ha recibido una buena OPA de los húngaros, que ya tienen los avales de bancos húngaros / Fotos: Pablo Moreno
En Talgo, no sé sabe si gustan más húngaros que los suizos, pero sí que la OPA lanzada por los primeros es buena. A pesar de que dentro del Gobierno Sánchez se mira con cierto recelo, sobre todo, por parte del ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, mientras el titular de Industria y Turismo, Jordi Hereu, subraya que las opiniones de su compañero “no eran oficiales”.
Buena prueba de que la opa de los húngaros de Ganz-Mavag es buena se puede ver este Lunes Santo, cuando la cotización de Talgo ha tenido un subidón (+5,54%) por el rumor de una contraopa de Stadler, operación que ha sido adelantada por El Economista. Desde este fabricante ferroviario suizo -que tiene una planta en Valencia donde emplea a 1.870 personas- no se hacen comentarios al respecto, pero a pesar del subidón en bolsa, la cotización de Talgo se ha quedado en 4,48 euros, sin alcanzar ni superar los 5 euros por acción ofrecidos por Ganz-Mavag. Todo ello en una sesión bursátil en la que el Ibex 35 solo ha ascendido un 0,08%.
Los analistas del Banco Sabadell han destacado que no es la primera vez que surge el rumor de la posible compra de Talgo por Stadler, y que el fabricante suizo nunca ha confirmado el interés, por lo que ven poco probable que salga adelante. Asimismo, en las primeras horas de la sesión bursátil, estimaban que la cotización del fabricante de trenes que preside Carlos de Palacio y Oriol y dirige Gonzalo Urquijo reaccionara positivamente... como así ha sucedido.
Ahora la prioridad para Talgo es explicar bien el retraso en la entrega de los trenes Avril a Renfe, porque el operador público ferroviario ha elevado la indemnización a 167 millones… cifra que seguirá subiendo a partir del 1 de abril. Volviendo a la opa de los húngaros, conviene recordar que desde su lanzamiento, el Consejo de Administración de Talgo confirmó que “la oferta es amistosa”, la contraprestación “es atractiva para los accionistas” y los tres consejeros dominicales representantes de Pegaso Transportation International (dueña del 40,033%) la aceptan. Dentro de la sociedad Pegaso, el 63% está en manos del fondo Trilantic (quiere irse de Talgo, en cuyo accionariado entró en el año 2006 ); el 20,3% es de la familia fundadora, la familia Oriol, que está cada vez más desplazada; y también tiene una participación Torreal (familia Abelló). Tras Pegaso, en el resto del capital de Talgo aún no sé sabe su postura frente a la opa de los húngaros, y destacan: la familia Torrente Blasco (5,037%), la aseguradora Santa Lucía (2,86%), la gestora de activos francesa Amundi (2,05%), la gestora del Banco Santander -Santander AM- (1,86%) y el fondo soberano noruego Norges Bank (1%), entre otros.
Paralelamente, este Lunes Santo, la Federación de Industria, Construcción y Agro del sindicato UGT (FICA UGT) ha pedido a Talgo y la empresa húngara que informen al Comité Intercentros (el máximo órgano de representación de los trabajadores de Talgo en España y en el que están representados todos los sindicatos de la empresa) de sus planes, después de que la dirección convocara a un representante de cada sección sindical a una reunión con los húngaros. Una convocatoria que “parece obedecer más a un intento por "hacerse una foto" con las Secciones Sindicales, que a oficializar una reunión en la que se levante acta sobre el contenido tratado, se aporten propuestas ante la incertidumbre creada por la OPA lanzada por la empresa húngara, y la información tratada pueda ser traslada al conjunto de los trabajadores”, se ha quejado FICA UGT.
