La soberbia de la vicepresidenta ecológica, Teresa Ribera, no tiene límites. Decíamos que no recibe a las empresas energéticas españolas y sólo quiere hablar con ecologistas, y lo sabe bien Foro Nuclear, porque no ha logrado reunirse ni una sola vez con ella desde que está en el Gobierno Sánchez (y ya van tres desde julio de 2018).

Esto es llamativo, pues aunque sólo fuera por cortesía sería lógico que al entrar a un Ministerio su titular se reuniera con todos los implicados de su sector. La asociación que preside Ignacio Araluce y agrupa a la industria nuclear española no ha visto a Ribera, pero sí a la secretaria de Estado de Energía, Sara Aagesen, quien se incorporó el 17 de enero de 2020. Eso sí, el encuentro tuvo lugar hace tiempo y el último solicitado no ha obtenido respuesta.

Foro Nuclear ha insistido en que se debe replantear el cierre nuclear acordado en 2019 porque el contexto actual es muy diferente y “la mayoría de países han dado un golpe de timón para aumentar la independencia energética, asegurar el suministro y abaratar el coste

Todo esto ayuda a entender que Ribera haya llegado a perder los papeles y a arremeter contra Josu Jon Imaz, CEO de Repsol, tildándole de negacionista y retardista, a pesar de que este último le puede dar más de una lección sobre descarbonización realista y sin demagogia. Por si esto no bastara, Ribera también pisa fuerte en política, quizá con la vista puesta en las elecciones europeas del próximo junio, y se lanzó contra el juez Manuel García-Castellón.

Foro Nuclear ha insistido en que se debe replantear el cierre de reactores acordado en 2019 porque el contexto actual es muy diferente. “La mayoría de países han dado un golpe de timón para aumentar la independencia energética, asegurar el suministro y abaratar el coste”, ha explicado Araluce. En Europa, todos menos España y Alemania han apostado por continuar con la nuclear que tenían y/o por construir nuevos reactores. “Europa va por una autovía que apuesta por la nuclear y las renovables, mientras España va por la misma autovía, pero en sentido contrario al apostar por renovables sin nuclear”, ha añadido. Todo ello, pese a que muchos expertos consideran que la nuclear es el mejor complemento de las renovables en la lucha contra el cambio climático y de que la Agencia Internacional de la Energía (AIE) señala que sin nuclear es imposible descarbonizar. Además, en la última Cumbre del Clima (la COP28) celebrada en Dubái, 22 países firmaron un compromiso para triplicar la generación nuclear de aquí a 2050, y ya se han unido otros dos, llegando a 24.

Producción y potencia por fuentes en España en 2023

En este contexto, Foro Nuclear reafirma que la nuclear es fuente de estabilidad, robustez y competitividad, a la vista de los resultados provisionales de 2023 obtenidos con datos de Redeia. El año pasado, la nuclear aportó el 20,34% de la producción de electricidad, siendo la segunda fuente de generación tras la eólica, pero con muchísima menos potencia (7.117 megavatios, el 5,71% del total) y de forma mucho más eficiente y competitiva al funcionar el 87,06% de las horas del año, y ayudando a contener el precio de la luz y evitando 20 millones de toneladas de CO2. En concreto, la nuclear funcionó 7.626 horas frente a las 2.040 de la eólica o las de la solar térmica y las 1.515 de la solar fotovoltaica, o sea, muchísimas menos horas aunque cuentan con unas respectivas potencias mucho mayores (de 24,65%, 1,85% y 19,77% sobre el total). 

Si se mantiene el cierre de los 7.117 MW de energía nuclear, se necesitarán casi 30.000 MW de eólica o bien más de 40.000 MW de fotovoltaica para sustituirla

Si se mantiene el cierre nuclear, se necesitarán casi 30.000 MW de eólica o bien más de 40.000 MW de fotovoltaica para sustituirla. Y ojo, la gestión de la red eléctrica, que ya necesita urgentes inversiones porque está habiendo apagones, será mucho más complicada y será necesario el desarrollo de almacenamiento y cambios porque se va de grandes productores de energía que la envían a grandes distancias a pequeños productores que la mandan a centros de consumo más cercanos (por ejemplo, esto se ve muy bien con el autoconsumo). Además, las renovables no pueden regular la tensión de la red ni resisten ante la potencia de cortocircuito, dos aspectos que sí hacen las centrales nucleares. 

Funcionamiento por fuentes de generación de electricidad en España en 2023

Foro Nuclear no sólo pide que se replantee el cierre nuclear, sino también que no les pongan más palos en la rueda mientras están funcionando. Como saben, Ribera insiste en clausurarla y asfixiarla más con impuestos, a pesar de que ya paga 25 euros/MWh, lo que supone el 35-40% de sus ingresos totales. Asimismo, rechazan el incremento del 40% (3,14 euros/MWh) de la tasa Enresa (la cual hasta ahora suponía 450 millones de euros anuales) a partir del próximo 1 de julio a través de un Real Decreto que se ha publicado poco después de que fuera aprobado el séptimo Plan General de Residuos Radiactivos (PGRR). Araluce ha señalado que han pedido la información económico-financiera económico-financiera a Enresa que respalda dicho aumento y también una ampliación del plazo para hacer alegaciones. Además, insiste, como ya refirió en su entrevista con Hispanidad, en que si les bajaran los impuestos, la energía nuclear sería más barata”.