Cuando ya hemos rebasado el meridiano de las presentaciones de las principales sociedades de nuestro Ibex 35, este miércoles llegan los resultados de Iberdrola. La compañía eléctrica últimamente viene siendo más noticia en la prensa por los plantones de su presidente ejecutivo, Ignacio S. Galán, al presidente del Gobierno o sus calificaciones fuera de tono a los usuarios del mercado regulado, regresa para analizar el desempeño de un ejercicio que para el sector energético ha sido una prueba de resiliencia por las excepcionales condiciones en las que se ha desarrollado su actividad a causa de la situación geopolítica que estamos viviendo. Además, Galán, que nombró un CEO para quitarse la presión del mercado y de los fondos (sobre todo de BlackRock), aunque seguirá mandando lo mismo muchos años más, no ha escatimado en referir la importancia de seguridad jurídica, aludiendo a su falta en España en númerosas ocasiones y escenarios. 

La previsión que Iberdrola realizó para el ejercicio 2022 fue de entre 4.000 y 4.200 millones de euros (M€) de beneficio neto, pero el presentado ha sido de 4.338,6M€, un 3,30% más que el mejor de los escenarios previstos y un 11,7% superior al registrado en 2021. Si bien España ha aguado las celebraciones, pues registró una caída del beneficio del 19%, según informa, causada por las medidas fiscales y regulatorias además de los aumentos en los costes energéticos no repercutidos en la factura energética al cliente, como ha destacado el propio Galán en el vídeo que se ha difundido. Un descenso del beneficio en nuestro país que supera el del 14% que presentaba en los nueve primeros meses. En sentido positivo, destaca el crecimiento del beneficio del 36,4% en Brasil y del 32,2% en EEUU, que registraron mejor resultado con importantes aumentos en sus ingresos y menor incidencia tributaria. Y no hay que olvidar que EEUU es el principal destino inversor de su plan estratégico ni que Galán ha montado una estructura jurídica y societaria muy movible por la que la eléctrica puede ser, por ejemplo, alemana, mañana

El margen bruto se ha situado en 20.199,4M€ (+18,4%), sobre todo gracias al negocio de Redes en EEUU y Brasil, que aumentó un 19,8%, hasta 9.908M€. Mientras que España, con una importante afectación por los topes en tarifas, la elevación de costes y la menor producción hidroeléctrica, ha aportado 5.340,5M€

El margen bruto se ha situado en 20.199,4M€, tras registrar un crecimiento del 18,4% basado en el negocio de Redes en EEUU y Brasil, que aumentó un 19,8%, hasta 9.908M€. Reino Unido contribuyó con 3.024,9M€ (+2,5%), mientras que España, con una importante afectación por los topes en tarifas, la elevación de costes y la menor producción hidroeléctrica, ha aportado 5.340,5M€.

El coste operativo neto ha sido de 5.209,1M€, el cual se ha incrementado en un 23,2% y donde los servicios exteriores, 3.601,9M€ (+22,7%) representan el 44,62% del total; los costes de personal, 3.364,7M€, crecen un 12,1%, significan el 58,82% del total y se mantienen en línea con un crecimiento del 3,6% de la plantilla que se compensa con una reversión de provisiones por pensiones en EEUU. La partida de tributos, 1.762,2M€, registra un incremento del 112,7% debido al efecto comparativo con el ejercicio precedente que registró reversiones por sentencias judiciales favorables.

El ebitda ha crecido un 10,2%, a 13.228,1M€, de los que el 34,9% correspondió a España, donde la producción eléctrica bajó un 7% y descendieron un 6% los clientes de gas. EEUU aportó el 19,7% del ebitda; Brasil, el 17,28% y Reino Unido, el 18,8%

El ebitda ha crecido un 10,2%, hasta los 13.228,1M€. La aportación al ebitda por negocios ha sido del 50,64% de producción y clientes, mientras que el de redes fue del 49,33%. Por áreas, el 34,9% correspondió a los negocios en España, el 19,7% a los de EEUU, el 17,28% a los de Brasil y el 18,8% a los de Reino Unido. Y ojo, porque en nuestro país ha obtenido un elevado ebitda, y el beneficio neto no sólo ha bajado por medidas fiscales y regulatorias y mayores costes, también por los descensos en producción eléctrica (-7%) y en clientes y suministros de gas, como se puede ver en la tabla inferior. En producción, Iberdrola ha tenido descensos en todas sus energías menos la solar (+74,4%), la nuclear (+3%) y los ciclos combinados de gas (+0,8%); con fuertes desplomes de más del 33% en hidroeléctrica y minihidroeléctrica por la sequía y las menores lluvias. Por su parte, los clientes de luz sólo han crecido un 1,1%, a 10,88 millones de usuarios; mientras los de gas han bajado un 6%, a 1,35 millones. 

Cifras de producción, capacidad y clientes de Iberdrola en España

El coste registrado en la cuenta de resultados por el resultado financiero neto ha sido de 1.837,5M€, un 83,2% superior al del ejercicio precedente, que recogía 207M€ por ingresos extraordinarios por intereses de demora de sentencias judiciales. En el presente se han registrado -1.822M€ por el coste de la deuda, un 38,9% superior, y 15M€ por pérdidas de derivados y otros, que en el 2021 fueron 102M€ positivos.

La deuda financiera bruta ha crecido en 5.748M€, un 12,96% en términos porcentuales, alcanzando los 50.082M€. De esta cuantía, con entidades de crédito y obligaciones es el 93% y supone un apalancamiento del 42,8%, 1,8 puntos básicos más que en el ejercicio precedente y que tiene una vida media por encima de los seis años. La deuda financiera neta ha crecido, pasando de 39.360M€ a 44.185M€, y en términos ajustados, ha pasado de 39.119M€ a 43.749M€. 

El flujo de caja generado después de los 1.477,9M€ pagados por dividendos ha ascendido a 9.645,6M€, un 16,7% superior al registrado en ejercicio anterior. Las inversiones crecieron por encima de los 10.370M€, de los que unos 3.000M€ se destinaron España y el resto a otros países, destacando EEUU, Reino Unido y Alemania. 

La deuda financiera bruta ha crecido en 5.748M€, un 12,96% en términos porcentuales, alcanzando los 50.082M€. De esta cuantía, con entidades de crédito y obligaciones es el 93% y supone un apalancamiento del 42,8%

Puede que no comparta las formas que algunas veces utiliza el presidente de Iberdrola en sus críticas y reivindicaciones de los últimos tiempos a propósito de los últimos proyectos impositivos del Gobierno, siempre al alza. Tiene que ser desalentador con tanto esfuerzo inversor soportar contra la cuenta de resultados los momentos económicos malos y explicarlos al accionariado al que te debes, y que cuando llegan momentos en que el mercado te permite unos resultados más o menos razonables te venga el gobierno de turno y de forma populista decida compartir el beneficio que has soportado con la financiación y riesgo de tus accionistas a los que te debes y por real decreto, mediante impuestos extraordinarios, que esta mañana su presidente ha cifrado en un total de 7.500M€, de los que 2.600M€ se abonaron en nuestro país, siendo la eléctrica uno de los tres mayores contribuyentes. Claro que Galán tampoco debería presumir tanto, porque Repsol ha realizado en 2022 la mayor contribución fiscal de su historia (17.000M€), de los que 12.000M€ los han pagado en España. Eso sí, tras los últimos proyectos impositivos del Gobierno Sánchez el siguiente paso puede ser una nacionalización o directamente una expropiación... algo que los de Unidas Podemos ya han aludido alguna otra vez. 

En la conferencia con analistas, Galán ha destacado que el nuevo impuesto a las energéticas les supondrá un pago de 200M€ este año y que ya lo han recurrido ante la Justicia porque tiene impacto sobre los ingresos y no sobre los beneficios extraordinarios. Es más, consideran que “incumple la Constitución Europea y el Derecho europeo y no esperamos que este año haya una decisión de los tribunales, probablemente el año que viene”, ha referido el director de los servicios jurídicos de la eléctrica, Gerardo Codes.

Galán ha hablado de impuestos extraordinarios que ha cifrado en un total de 7.500M€, de los que 2.600M€ se abonaron en nuestro país. A estos se sumará el nuevo impuesto a las energéticas que les supondrá un pago de 200M€ este año y que ya han recurrido ante los tribunales

Respecto a la propuesta de la reforma del mercado mayorista de electricidad en la UE, Galán parece que respalda menos la propuesta española (que supone un deseo por volver al Marco Legal y Estable del felipismo y que no gusta a las eléctricas españolas ni a las del resto de Europa) que la de otros países (Alemania, Holanda y países nórdicos), que va de “más mercado, más Europa, más interconexiones y más flujo de energía”. Además, ha destacado estos países y la asociación de reguladores de electricidad (ACER) han defendido que se incentive la inversión en renovables, energías que Galán ha convertido en un producto financiero. “Hay que diferenciar entre el mercado (ventas) y el despaching (la generación). El 80% de ésta ya se ha vendido en contratos bilaterales y solo acude a spot el 20% restante, así que hay que buscar la manera de dar más fuerza a la contratación por PPAs (contratos de compraventa de energía a largo plazo)”, ha señalado Galán, quien también ha referido que no sólo está el modelo de los PPA, sino también de los Cfd (contratos por diferencias) que hay en Reino Unido. 

Cifras de resultados de Iberdrola en 2022