Decíamos que la vicepresidenta ‘sandía’, Teresa Ribera, es verde al apostar por todo lo ecológico y también es roja porque ahora pretende convertir al Gobierno en el comprador único de energía, como se ha podido ver en la propuesta de reforma del mercado mayorista de electricidad que ha enviado a Bruselas. Hace unos días, fuentes del sector eléctrico apuntaban que Ribera y Sánchez quieren volver al Marco Legal y Estable, que estuvo vigente entre 1988 y 1997, es decir, en la mayoría de los años de la etapa felipista, pero ahora eléctricas con nombre y apellidos les han dado la primera en la frente porque no les gusta dicha reforma.

No lo han hecho en solitario, sino a través de la Asociación de Empresas de Energía Eléctrica (Aelec) -la cual está integrada por Endesa, Iberdrola y EDP-. Entre otros aspectos, consideran que primer lugar, la propuesta española de establecer precios fijos para la producción nuclear e hidroeléctrica pondría en peligro el libre mercado del sector eléctrico, “defendido en Europa en las últimas décadas”. Y es que supondría una vuelta al Marco Legal y Estable felipista, en el que el Estado era el comprador único de energía, y también quien fijaba el precio de compra y el de venta.

Importante: Endesa, Iberdrola y EDP recuerdan que más del 70% de la energía de las compañías españolas está ya vendida y comprometida a plazo a través de los PPA

Aelec también ha advertido que la reforma propuesta por España podría elevar la incertidumbre regulatoria y afectar a las inversiones que el sector debe realizar para lograr la transición energética. Por eso, ha pedido que se haga un análisis del coste y beneficio de las implicaciones que dicha reforma tiene para los operadores en aras de no perjudicar las inversiones y planes de expansión que se tienen ya comprometidos.

La asociación formada por Endesa, Iberdrola y EDP recuerda que “el sector eléctrico español viene firmando los PPA (acuerdos de compraventa de energía) más baratos de Europa, lo que impacta positivamente en la economía y la sociedad española, así como en la sostenibilidad del medio ambiente”. Es más, ha subrayado que más del 70% de la energía de las compañías españolas está ya vendida y comprometida a plazo, por lo que los cambios estructurales del mercado deberían de realizarse con el máximo consenso entre el regulador y los operadores.

Aelec ofrece su colaboración al Gobierno para definir un mercado eléctrico acorde con la transición energética y la realidad de los operadores del sector, y considera que la propuesta se vería más reforzada y acreditada si se contara con las aportaciones de dichos operadores

Aelec ha ofrecido su colaboración al Gobierno para definir un mercado eléctrico acorde con la transición energética y la realidad de los operadores del sector. Asimismo, ha considerado que la propuesta se vería más reforzada y acreditada si se contara con las aportaciones de dichos operadores. Eso sí, también ha referido que la propuesta incluye algunos aspectos que el sector lleva defendiendo los últimos años, como los mecanismos de capacidad o dotar al precio del mercado eléctrico de una mayor estabilidad.

Es la primera en la frente que Aelec da al Gobierno ante su propuesta de reforma del mercado mayorista de electricidad comunitario, pero no su única queja en materia energética. A finales de septiembre, se refirió al nuevo impuesto a las energéticas, criticando que el español establece un gravamen sobre ingresos y también afecta a la electricidad, mientras la propuesta europea apostaba por un gravamen sobre beneficios al petróleo y al gas, y pidió que el español se homogenizará a la idea europea para no afectar a las inversiones renovables, pero no han tenido éxito. Y por cierto, ese ‘impuestazo’ español a las energéticas supondrá que paguen por Sociedades un tipo efectivo no del 25% sino del 40%, según fuentes del sector.