
Parece que Naturgy se encuentra en un callejón sin salida desde hace meses… Ahora se ha conocido que ha logrado un buen resultado en su auto-OPA, la cual ha sido aceptada por el 86,37% del capital…, mientras persiste el problema con los fondos de inversión presentes en su capital.
En la auto-OPA se han recomprado los 88 millones de acciones que se pretendía, invirtiendo 2.332 millones de euros. La aceptación ha alcanzado el 86,37% del capital, y dentro de este porcentaje conviene subrayar que un 84,97% ha correspondido a sus cuatro accionistas de referencia: CriteriaCaixa, el fondo BlackRock (se hizo con la participación de GIP hace un tiempo), el fondo CVC (a través de la sociedad Rioja, que comparte con Corporación Financiera Alba -el holding inversor de la familia March) y el fondo IFM.
El mercado, y por ende, los inversores, no han aplaudido el buen resultado de la citada auto-OPA a media mañana: la cotización de Naturgy desciende un 0,8%, frente a un Ibex 35 que asciende en el mismo porcentaje. Se ve que se esperaban el resultado o que puede que den más importancia al paso posterior: la colocación progresiva de paquetes de acciones… con el objetivo de aumentar el free float (capital flotante) a un nivel adecuado, de en torno al 15% para retornar a los principales índices bursátiles (en especial, a los MSCI). Los analistas del Banco Sabadell han considerado que se trata de una “noticia positiva de impacto limitado” y que “según lo comprometido en la presentación del plan estratégico, debería ajustar en la misma proporción de la autocartera el dividendo 2025-2027”.
Como saben, a la auto-OPA, le seguirá la colocación posterior y gradual de paquetes de acciones, unos movimientos con los que la energética que dirige Francisco Reynés gana tiempo, aunque sigue sin solucionar el problema que tiene con los fondos de inversión que están presentes en su capital. Y ojo, porque cuando sube el free float, el precio de la acción que está artificialmente alto (Naturgy cotiza en estos momentos a unos 26,5 euros) suele bajar… y esto hará poca gracia a los fondos, sobre todo, a CVC y BlackRock/GIP, que llevan tiempo barajando vender sus respectivas participaciones o parte de las mismas, y que no estarían dispuestos a irse sin plusvalías. Ambos fondos no pueden salir de cualquier manera de la energética no sólo por el dinero que obtendrían, sino por el pacto de sindicación que tienen, y además, no hay que olvidar que la exclusión de bolsa es algo que impide el Gobierno (es una de las condiciones que puso para permitir la entrada del fondo australiano e incordiante IFM, y fue una decisión más que acertada).
Ante este complicado panorama se llegó a buscar a la energética emiratí Taqa: esta última no tiene problema para invertir dinero, pues tiene como primer accionista con un 90% a Abu Dhabi Power Corporation, una filial de ADQ (una de las empresas de inversión estratégica que es propiedad del emirato de Abu Dabi). Recuerden que Criteria Caixa tenía firmado hasta un memorando pero se rompieron las negociaciones porque Taqa no sólo quería controlar la mayoría del capital sino que quería mandar, y además había hablado con IFM y Javier de Jaime, representante del fondo CVC en España y que viaja mucho a Dubái. Al presentarse los resultados de 2024 a finales de febrero, Reynés sólo refirió que “las negociaciones con Taqa no son de la compañía, sino un proyecto de los accionistas, hay que preguntarles a ellos”.
Desde entonces, sólo se ha conocido que la emiratí no estaba negociando con Criteria sino con los fondos y contra Criteria, y que esta última podría permitir que Taqa llegara al 29,9%… si renunciaba al control de la gestión. Pero claro, los emiratíes no son tontos y aunque les sobre dinero para invertir por los petrodólares, no están dispuestos a hacerlo sin mandar. Y la idea de que Criteria lanzara una OPA por el 100% se antoja ahora más difícil, pues pondría en solfa el plan estratégico del holding inversor que preside Isidro Fainé y en el que se ha nombrado vicepresidente ejecutivo a Francisco Reynés, tras la salida de Ángel Simón. Ya saben que ahora la hoja de ruta de Criteria es invertir en empresas saneadas y con potencial de crecimiento... con el objetivo de alimentar la Obra Social de La Caixa. Y por ello ha descartado invertir en Celsa y en Europastry.
Y en el entretanto, Naturgy ha anunciado una alianza con Moeve (antes Cepsa, y que como saben tiene como primer accionista al fondo soberano de Abu Dabi (Mubadala), con un 61,5%, y al fondo de inversión estadounidense Carlyle, con el 38,5% restante). En concreto, se trata del lanzamiento de una oferta conjunta de luz, gas y movilidad para los clientes de ambas energéticas.