Moeve (antes Cepsa) insiste en ser verde sí o sí, incluso dejando su negocio tradicional de petróleo, como se reflejó notablemente con su cambio de nombre el pasado octubre, dejando de llamarse Compañía Española de Petróleos S.A. Ahora sale del negocio de exploración y producción (denominado upstream dentro del sector petrolero) en Hispanoamérica, al vender el activo que tenía en Surinam,… y ya solo le queda Argelia.

La aún petrolera, que está controlada en un 61,5% por el fondo soberano de Abu Dabi -Mubadala- y en un 38,5% por el fondo de inversión estadounidense The Carlyle Group, ha anunciado la venta de su participación del 25% en el Bloque 53 de Suriman a la petrolera francesa TotalEnergies. De esta forma, la petrolera francesa se unirá a dicho activo que está controlado en un 45% por la APA Corporation (antes Apache Corporation), una empresa independiente de energía con sede en EEUU y que se dedica a la exploración, el desarrollo y la producción de petróleo y gas natural; y en un 30% de Petronas, la compañía estatal malaya de petróleo y gas.

Vende su participación del 25% en el Bloque 53 de Suriman a la petrolera francesa TotalEnergies, un activo que está controlado en un 45% por la estadounidense APA Corporation y en un 30% por la malaya Petronas

No ha trascendido el precio de la operación, sólo que es un paso más en la estrategia ‘Positive Motion’ para transformarse en un proveedor europeo líder en moléculas verdes en esta década, bajo las riendas de Maarten Wetselaar en la silla de CEO. Con la venta de Surinam, desde el año 2022, Moeve se ha desprendido del 70% de su portfolio de upstream. Cabe recordar que el 1 de marzo de 2023 decidió salir de este negocio en Abu Dabi, que aportaba el 50% del upstream de la compañía, y sin perder de vista que se trata del país de su primer accionista (Mubada). Meses más tarde, el 26 de abril de 2024, vendió sus activos de exploración y producción de hidrocarburos en Colombia, y semanas después, el 8 de mayo de ese año, hizo lo mismo con el de Perú, que aportaba 900 barriles diarios de producción. Desde luego, los negocios de upstream en estos países hispanoamericanos no eran tan relevantes como el de Abu Dabi. Y ahora da un paso más y sale de Surinam. 

Tras esto, Moeve ya solo mantiene como principales activos de producción los situados en Argelia, pues hace tiempo que ya no tiene operaciones en Libia. En upstream, como se puede ver en su página web, apuesta por invertir en estudios y proyectos para la reducción de la intensidad de carbono, barriles de bajo coste, un equipo técnico de gran solidez y facilitar atractivas opciones de inversión en campos en producción (a partir de ahora, sólo en Argelia ya). Las desinversiones citadas se encuadran en la estrategia para transformarse de ser una compañía de petróleo y gas a una donde más del 50% del resultado bruto de explotación (ebitda) provenga de actividades sostenibles, como el hidrógeno verde y sus derivados o los biocombustibles de segunda generación. Sin embargo, en el tema del hidrógeno verde debería ser más prudente, pues hasta el muy verde José Manuel Entrecanales, presidente ejecutivo de Acciona, ha señalado que los números no salen... y sin duda es mucho mejor producirlo al lado de donde se va a consumir que transportarlo (la locura por la que apuesta Enagás... con mucho dinero público -de españoles y del resto de europeos-, por cierto). 

Quiere transformarse de ser una compañía de petróleo y gas a una donde más del 50% del resultado bruto de explotación (ebitda) provenga de actividades sostenibles, como el hidrógeno verde y sus derivados o los biocombustibles de segunda generación. Sin embargo, en el tema del hidrógeno verde debería ser más prudente, pues los números no salen...

Tampoco en resultados, Moeve anda como para tirar cohetes. Ojo, porque las desinversiones no sólo se han dado en exploración y producción: en los últimos años también ha vendido el negocio de butano, propano y autogás en España y Portugal. Claro que su estrategia en upstream es muy distinta a la de otras compañías de su sector, como la española Repsol, que acaba de vender su participación del 24% en el bloque Corridor (Indonesia). Esta última apuesta por concentrar su negocio de exploración y producción en 14 países, para centrarse en los activos y países donde tienen mayores ventajas competitivas, así como primar el valor sobre el volumen y liderar la reducción de emisiones de COen el sector al apostar por activos con menos emisiones por barril.