La ministra de Hacienda y Función Público, María Jesús (Marisu) Montero, ha abierto la puerta a rebajar, por fin, los impuestos en carburantes... Y recuerden que el Gobierno tiene margen -y bastante- para hacerlo: la mitad del precio de la gasolina y del gasóleo son impuestos, en concreto, IVA e Impuesto Especial de Hidrocarburos.

Este lunes, justo cuando la Plataforma de Defensa del Sector Transporte -formada por pymes y autónomos- ha empezado su paro indefinido, Marisu ha señalado ante los medios: “Vamos a estudiar un paquete de medidas, algunas de ellas pasarán por revisar a la baja la fiscalidad de algunos sectores o productos que estén claramente impactados por el incremento de la inflación (...). Con eso avanzo bastante respecto a la actitud del Gobierno”. Eso sí, no ha dado más detalles.

La Comisión Europea se ha abierto a desligar el precio del gas del de la luz, limitando el primero. Por ahora, son propuestas y habrá que ver qué se decide en el Consejo Europeo de la próxima semana, pero sí es interesante que se haya escuchado una demanda de España

Claro que ni la titular de Hacienda ni el Ejecutivo Sánchez lo harán por iniciativa propia ni de buena gana, sino debido al aumento de la inflación (cerró febrero en el 7,6%) y tras los pasos que ya han dado otros países europeos. En Francia, el primer ministro, Jean Castex, ha anunciado que se rebajará el precio del litro de combustible en 15 céntimos a partir del 1 de abril, en una entrevista a Le Parisien, lo que supondrá un gasto del Estado de 2.000 millones, pero no tocará los impuestos. En Portugal, ajustará semanalmente el Impuesto sobre los Productos Petrolíferos (ISP) que grava a los carburantes, del que ya devolvía una mínima parte (2 céntimos en la gasolina y 1 en el diésel) desde noviembre. En Irlanda, también se rebajará el impuesto especial que afecta al combustible para abaratarlos (20 céntimos en gasolina, 15 en diésel y 2 en diésel ‘verde’). Eso sí, hasta la fecha, ha sido Polonia el que ha actuado con más decisión en esta materia e incluso antes de la invasión rusa a Ucrania: rebajó el IVA de la gasolina del 23% al 8%, y también el de la luz del 23% al 5% y quitó el del gas, pasándolo del 8% al 0%.

Paralelamente, no hay que olvidar que la Comisión Europea se ha abierto a desligar el precio del gas del de la luz, limitando el primero. Por ahora, son propuestas y habrá que ver qué se decide en el Consejo Europeo de la próxima semana, pero sí es interesante que se haya escuchado una demanda de España (aunque claro, Pedro Sánchez, va a engordar aún más su orgullo con una gira por distintos países). Fuentes del sector eléctrico, refieren que el coste de compensar a las centrales de gas sería menor que el beneficio de haber limitado el precio del gas y que para ello no haría falta generar déficit de tarifa (lo cual siempre es una buena noticia, pues aún seguimos pagando el que no dejó Zapatero). Eso sí, aún no hay acuerdo entre las propuestas de las eléctricas: Engie apunta a un tope de 150 euros por megavatio hora (MWh) que es muy elevado, mientras otras españolas consideran que uno de 70-80 euros/MWh sí rebajaría la tarifa regulada (la denominada PVPC). Claro que no hay que olvidar que la situación es muy volátil y cambia todos los días.

Fuentes del sector eléctrico, refieren que el coste de compensar a las centrales de gas sería menor que el beneficio de haber limitado el precio del gas y que para ello no haría falta generar déficit de tarifa. Lo cual siempre es una buena noticia, pues aún seguimos pagando el que nos dejó Zapatero

Fuentes del sector apuntan que reformar el PVPC sería una medida más a largo plazo, cuando se calme un poco la situación actual de precios tan elevados. Asimismo, se considera que tiene sentido utilizar la gran capacidad de regasificación que tiene España y mandar más gas por Francia, pero para ello no sólo habría que retomar el proyecto del gasoducto MidCat, sino también reformar la red francesa para distribuirlo mejor al resto del viejo continente. Además, habría que ver si esto es más barato que hacer alguna planta regasificadora más en Francia, Alemania o Dinamarca, por ejemplo.

Respecto a los impuestos, este lunes, el secretario general de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), Mathias Cormann, ha referido que se deben aumentar los impuestos a las eléctricas, en un desayuno informativo organizado por Nueva Economía Fórum. Ante esta medida, fuentes del sector eléctrico, han referido que subir dichos tributos, sólo aumenta la recaudación del Estado y no entienden que esto pueda contribuir a rebajar la factura de la luz. Previsiblemente, en el próximo Consejo de Ministros, se prorrogarán las medidas fiscales vigentes, y puede que alguna más (Marisu ha abierto la puerta), pero no se ha dicho nada, por ejemplo, en el caso del IVA del gas, que ayudaría a rebajar la factura... aunque seguramente no se imite a Polonia, que lo ha quitado temporalmente, bajándolo del 8% al 0%.