El madrileño Francisco José Riberas (60 años) decidió dejar el Consejo de Administración de Telefónica, tras casi ocho años ocupando una silla como independiente. Una salida que se conoció a principios de mes y no es baladí, pues supone su ruptura con el intervencionismo empresarial que tanto gusta al Gobierno Sánchez, y encima tiene minusvalía en sus acciones.

El cese de José María Álvarez-Pallete orquestado por Moncloa para sustituirle en la presidencia por Marc Murtra fue la gota que colmó el vaso. Cabe tener en cuenta que normalmente a los presidentes de una compañía les echan sus propietarios, es decir, sus accionistas… pero en el caso de la teleco ya se sabe que no ha sido así. Riberas es licenciado en Derecho, así como en Ciencias Económicas y Empresariales, y no ha aguantado más el intervencionismo sanchista. Por eso ha decidido salir del Consejo y es probable que más adelante venda sus acciones, aunque ya valen la mitad que cuando entró… y si la cosa no mejora, aún la minusvalía sería mayor. No olviden que tras el cese de Pallete, la acción de Telefónica llegó a quedarse en 3,78 euros… y ahora está en 4,27.

Hace dos días, el Consejo de Telefónica aceptó la renuncia voluntaria de Riberas y considerando que su actual mandato vencerá el próximo 23 de abril, le ha agradecido “la dedicación y la inestimable contribución que ha realizado a Telefónica durante sus ocho años de mandato”. Cabe recordar que la incorporación de Riberas como consejero independiente se conoció el 4 de mayo de 2017, cuando la cotización estaba en 10,44 euros. Más tarde, en la Junta de Accionistas celebrada el 9 de junio de 2017, la acción estaba en 9,86 euros y se ratificó el nombramiento de Riberas. Desde entonces ha ido adquiriendo acciones de la teleco en distintos movimientos y el 21 de enero de 2018 se dio la paradoja de convertirse en el consejero con más acciones, incluso superando a Pallete. Este último destacaba que las intervenciones de Riberas en las reuniones del Consejo “siempre son pertinentes y nos hacen reflexionar”.

Algunas fuentes han señalado que Riberas tenía previsto dejar la teleco hace un tiempo para centrarse más en otras actividades. De hecho, es presidente ejecutivo de Gestamp, así como presidente de la Asociación Española de Proveedores de Automoción (Sernauto), consejero de CIEAutomotive, primer accionista de General de Alquiler de Maquinaria (GAM) e inversor de Wallbox.

En la teleco, dentro de la renovación del Consejo (que incluye el nombramiento de Carlos Ocaña como vicepresidente y la entrada del representante de la teleco saudí STC) se ha aprovechado la salida de Riberas para abrir las puertas a Ana María Sala y así reducir parte del déficit que tenía de consejeros independientes (el Código de buen gobierno de las sociedades cotizadas de la CNMV recoge que “el consejo de administración tendrá una composición equilibrada, con una amplia mayoría de consejeros no ejecutivos y una adecuada proporción entre consejeros dominicales e independientes, representando estos últimos, con carácter general, al menos la mitad de los consejeros”) y de mujeres (el Gobierno Sánchez fijó que hubiera al menos un 40% de consejeras antes del 1 de julio de 2024 ). De esta forma, la teleco alcanza 15 consejeros, de los que un 40% son mujeres y hay una amplia mayoría de independientes.

Dentro de la renovación del Consejo de Telefónica (que incluye el nombramiento de Carlos Ocaña como vicepresidente y la entrada del representante de la teleco saudí STC) se ha aprovechado la salida de Riberas para abrir las puertas a Ana María Sala y así reducir parte del déficit que tenía de consejeros independientes y de mujeres

Sala es licenciada en Derecho y se incorporó en 2005 al bufete Cortés Abogados (el despacho progre creado por MatíasCortés y su hermano) y es socia del mismo desde 2014. Sala ha asesorado sobre gobierno corporativo y sostenibilidad a sociedades cotizadas y no cotizadas españolas, ha participado en la reestructuración y refinanciación de grupos societarios nacionales e internacionales, ha asesorado a family offices en el desarrollo de sus actividades, ha participado en OPVs y OPAs, y tiene una dilatada práctica en arbitrajes internacionales. En la actualidad es secretaria no consejera del Consejo de Administración de Sacyr y secretaria no consejera del Consejo de Administración de Indra (ahora presidida por Ángel Escribano). Esto último resulta cuando menos curioso porque el que era presidente de Indra (Marc Murtra) hasta el pasado 18 de enero, ahora preside Telefónica, y Sala se incorporará al Consejo de esta última también si los accionistas lo aprueban. ¿Casualidad? Ya saben que las casualidades no existen, como refería el poeta, dramaturgo, filósofo e historiador alemán Friedrich Schiller. Las casualidades no, las coincidencias sí. 

Cortes Abogados es un bufete progre que ha estado ligado a Jesús de Polanco, PRISA y Sacyr, entre otras empresas. Se trata de un bufete mercantil. El nombramiento de Sala como consejera independiente es legal, pero el hecho de ser socia de Cortés Abogados hace preguntarse si de verdad será independiente.

Volvamos a Riberas. 2024 no ha sido un buen año en resultados para Gestamp, lejos de los récords logrados en 2023, y ha notado la crisis del automóvil, no como CIE Automotive, pero ambos comparten el mismo primer accionista: Acek Desarrollo y Gestión Industrial, el holding de la familia Riberas, que tiene el 74,979% de Gestamp y el 15,693% de CIE. Gestamp es un fabricante de componentes metálicos para el automóvil, cuyos ingresos han descendido a 12.001 millones de euros, frente al récord de 12.274 millones obtenido en 2023, en parte por los menores volúmenes de producción mundial de vehículos ligeros, así como la inestabilidad del mercado y la producción más lenta de vehículos eléctricos, especialmente en Europa occidental y en la región NAFTA (Canadá, EEUU y México). Eso sí, la fabricación de componentes relacionados con los vehículos eléctricos se ha mantenido estable y supone el 20% de las ventas de Gestamp.

El resultado bruto de explotación (ebitda) ha pasado de 1.371 millones a 1.319 millones; y el margen ebitda ha descendido del 11,2% al 10,8% en términos reportados… y al 11% sin el impacto del Plan Phoenix. Recuerden que dicho plan se ha lanzado para reestructurar el negocio de la región de NAFTA, una prioridad estratégica, pues seis de las 15 plantas que allí tienen un rendimiento muy por debajo de la media del grupo, y va evolucionando bien. Por su parte, el beneficio neto ha caído un 33%, del récord de 281 millones a 188 millones.

El flujo de caja libre ha pasado de 207 millones a 103 millones (134 millones sin el Plan Phoenix), a pesar de la mejora en el cuarto trimestre y del impacto negativo de las divisas. La deuda financiera neta se ha situado en 2.097 millones, bastante en línea con la de 2023 (2.058 millones), y apalancamiento ha sido de 1,6 veces el ratio de deuda neta sobre ebitda, uno de los más bajos desde que salió a bolsa el 7 de abril de 2017.

Cifras de Gestamp en 2024

A pesar de malos resultados, Gestamp ha crecido “por encima del mercado”, por la diversificación geográfica, la diferenciación de productos y su estrategia basada en la innovación. Para este año, prevé que los volúmenes de producción mundial se mantengan en torno a 89 millones de vehículos. “Gestamp ha alcanzado una sólida cartera de pedidos para los próximos cinco años de 51.100 millones, una cifra que respalda los objetivos de ingresos para el período 2025-2029”, ha destacado la compañía. Su presidente ejecutivo, Francisco José Riberas, ha referido que “pese a haber vivido uno de los entornos más adversos de los últimos años como sector, los resultados alcanzados en 2024 vuelven a mostrar nuestra fortaleza financiera, así como el éxito de nuestro modelo de negocio para adaptarnos a un entorno exigente e incierto, en el que los volúmenes de producción de vehículos continúan bajando”.

En paralelo, se han conocido las remuneraciones de los consejeros de Gestamp. Cabe destacar a Francisco José Riberas ha cobrado 1,078 millones, un 3,16% más; le siguen tres consejeros independientes (Alberto Rodríguez-Fraile, Ana García Fau y César Cernuda), con 130.000 euros cada uno; y el hermano del presidente, JuanMaríaRiberas (también conocido como Jon), que es vicepresidente y consejero dominical, con 110.000 euros (+4,76%). En total, se han destinado 2,358 millones a remunerar a los 14 consejeros. Además, la remuneración media de las empleados ha crecido un 3,03%, de 33.000 euros a 34.000.