
Sucedió en torno a las 20 horas del martes 7. Un hombre de origen marroquí se acercó a una niña de ocho años para tratar de convencerla y que saliera del establecimiento donde se encontraba, cercano al negocio familiar de sus padres, con la excusa de enseñarle algo en su teléfono móvil.

Una vez fuera, varios clientes del local observaron cómo el individuo mantenía un comportamiento inapropiado con la menor, lo que provocó una reacción inmediata.
La rápida llegada del Grupo Operativo de Apoyo y Prevención (GOAP) de la Policía Local de El Ejido y de los agentes de la Guardia Civil evitó que los ciudadanos lincharan al agresor, del que se sabe que no tiene vinculación familiar con la víctima.
El detenido, quien pudo ser detenido gracias a la intervención de esas personas, se acogió a su derecho a no declarar y está en libertad provisional, después de que la Sección Civil y de Instrucción del Tribunal de Instancia número 4 de El Ejido (Almería) acordara la medida.









