Comenzamos esta crónica semanal sobre persecución a los cristianos con el Líbano como protagonista. Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN) alertó que la crisis económica y política del país se ha profundizado y esto ha puesto en peligro a la comunidad cristiana local. En un comunicado, ACN señaló que esta semana, la moneda del Líbano, un país que se ha convertido en “hogar de la comunidad cristiana más grande de Medio Oriente”, se ha devaluado a un mínimo histórico de 17 mil por dólar, llegando a perder un 90% de su valor “desde que comenzó una crisis económica en 2019”. “La creciente ira contra el gobierno se ha visto exacerbada por una crisis de combustible. La escasez de reservas extranjeras necesarias para importar combustible ha hecho que muchos libaneses se despierten a las 3:00 a.m. para hacer fila en las estaciones de servicio”, indicó la fundación pontificia.

Según publica Aciprensa, la directora de proyectos de ACN, Regina Lynch, indicó que a lo largo de los años se ha visto un aumento del extremismo en otros países, pero el Líbano “ha sido un lugar donde cristianos y musulmanes podían vivir juntos, educarse juntos, trabajar juntos, y nos gustaría que esto continúe”. Y es que, en el Líbano no se “establece que el islam sea una religión estatal” y hay “un acuerdo informal que dicta que el presidente sea católico maronita”.

En este momento, las escuelas católicas están en peligro de cerrar. Los institutos católicos como los hospitales y las clínicas están luchando por sobrevivir, incluso para encontrar los fondos que necesitan para comprar medicamentos y equipos médicos esenciales

Pero en este momento, “las escuelas católicas están en peligro de cerrar. Los institutos católicos como los hospitales y las clínicas están luchando por sobrevivir, incluso para encontrar los fondos que necesitan para comprar medicamentos y equipos médicos esenciales”, afirmó.

Frente a este problema, ACN resaltó la jornada de oración convocada por el Papa Francisco para el 1 de julio y señaló que los líderes cristianos del Líbano “orarán por soluciones a la crisis cada vez más profunda del país”.

 

Los cristianos de la India celebran su día frente al avance del nacionalismo hindú

Tampoco resulta fácil la situación para los cristianos de la India. Pero lejos de rendirse y frente al auge del nacionalismo hindú -y del panteísmo que pregona el fundamentalista primer ministro, Narendra Modi-, los cristianos de todas las confesiones han celebrado juntos el Día de la India Cristiana, el 3 de julio, con la que pretenden desmontar la idea de que el cristianismo es una religión extranjera.

En esa fecha se recuerda el martirio de Santo Tomás, que según la tradición fue el evangelizador de la India. Según la tradición Santo Tomás, uno de los doce apóstoles de Jesús, llegó a la India en el año 52 d.C y evangelizó parte del país. El 3 de julio se conmemora el martirio de este santo que tuvo lugar en el año 72 d.C en Chennai (India).

Tal como recoge Aciprensa, en los últimos años ha aumentado el nacionalismo hindú, por el que se pretende unir el concepto de nacionalidad india con el de religión hinduista, considerando ciudadanos de segunda clase a las minorías religiosas como la cristiana.