Recientemente, la Policía detenía en Cartagena a un joven magrebí, acusado de agredir en una calle de Los Barreros a una mujer con la que no tenía relación alguna.

Según las informaciones que trascendieron por los propios vecinos de la barriada -publica La Verdad de Murcia- la víctima iba con su hija de 2 años en brazos y empujaba un carrito cuando el individuo se abalanzó sorpresivamente sobre ella y comenzó a golpearla en la cara y la cabeza. Las mismas fuentes destacaron que no medió conversación alguna y la agresión pilló a la mujer desprevenida. Logró derribarla y en el suelo siguió dándole patadas en la cara; ella, mientras, protegía a la niña. Como consecuencia de la paliza, tiene varias fracturas y ha sido operada por especialistas del servicio de Cirugía Maxilofacial.

La mujer ha concedido una entrevista a Ok Diario en la que expresaba: «El individuo o como se quiera llamar, de momento está en prisión, pero no sé lo que va a durar porque las leyes de este país van como van y me parece fatal porque es un chico que ya tiene bastantes delitos por agresión y no sé cómo puede estar en la calle. Me parece fatal, ya sea marroquí o español o lo que sea, la persona que hace el mal que se vaya a su país y ya está. Aquí, bienvenido el que venga a trabajar, a hacer el bien y sea buena persona, el que no, que se vaya. Lo siento mucho, pero que se vaya».

El detenido se negó a declarar ante la Policía y en el juzgado, y el juez le envió a prisión provisional por un presunto delito de lesiones agravadas. A los policías que lo detuvieron sí les habló antes de que lo llevaran a comisaría. «He tenido un mal día jugando a las tragaperras», fue su explicación a la paliza.