ZP mete los pies y Rubal las manos. Buitres de allende, cainitas de aquende. Los bancos españoles no son malos, son tontos. Camps debe dimitir pero… Obama apoya al Dalia Lama, no a los chinos. 15-M: pasacalles anticapitalista

Corrillo de periodistas en Moncloa, en el estreno del ministro de Fomento, Pepe Blanco, como portavoz del Gobierno: ¡Qué peligro! Alguien comenta la profundidad del cambio político operado en España durante los últimos días: en efecto, Zapatero mete los pies al andar mientras Rubalcaba mete las manos al hablar… y Pepiño mete la puntilla cainita.

Son dos poses distintas con un mismo intento: aparentar una humildad que se detesta. Si algo caracteriza a ambos líderes es su soberbia por eso exhiben una gestualidad humildica en sus poses y andares. Por eso actúan según el más acreditado afán del orgulloso: cuando el adversario les tiende la mano la muerden.

Mutua soberbia la de Zapa y Rubal, que se deja ver en su susceptibilidad -se sienten ofendidos de continuo y sus contrarios jamás poseen rectitud de intención- su resentimiento –ambos, sobre todo José Luis, pero también el candidato Alfredo, siguen viviendo en la atmósfera guerracivilista de 1936. Su enemigo no es la derecha, pues ambos han abrazado el peor de los capitalismos, el capitalismo financiero, sino el cristianismo, personificado en la Iglesia de Roma. El leonés considera que Rubalcaba es un traidor y el cántabro desprecia a Zapatero, pero ambos pertenecen al mismo universo, el del Nuevo Orden Mundial(NOM).

Sus políticas también son muy similares: el mundo se divide entre la caverna reaccionaria y el radiante universo progresista, por lo que se hace necesario manipular a los medios informativos y, en la medida de lo posible, al medio más influyente del siglo XXI –Internet- y ambos, finalmente, el que mete los pies y el que mete las manos, tiene dos objetivos políticos: firmarle el finiquito al terrorismo vasco sin importarles las víctimas y así fomentar el social-nacionalismo: una alianza entre PSOE y los partidos nacionalistas y soberanistas como única forma de conseguir el vuelco electoral, que se presenta difícil por su fracaso en la política económica. Y para ello son capaces de todo. He dicho de todo.

Pero ahora lo preocupante es el previsible ganador de las próximas elecciones, Mariano Rajoy. El gallego tiene más de incoherente que de orgulloso. Más que principios NOM don Mariano considera que ningún principio es tan importante como para poner en riesgo su posición. El PP actual se rige por el mandamiento de Groucho Marx: "Estos son mis principios, pero si no le gustan tengo otros". En eso también se parece mucho a don José María Aznar, quien comenzó a ser coherente con sus principios justo cuando abandonó la Moncloa.

Verbigracia, don Mariano considera que el voto católico existe. Claro que existe lo que ocurre es que el PP lo tiene cautivo, por lo que no tiene que ofrecerle nada. Es la viva imagen de la derecha pagana: enarbola el espantajo del Zapaterismo para advertir a los cristianos, y a todo aquel que simplemente crea en algo, que, o le votan a él o estarán posibilitando la permanencia del Zapaterismo, que, no lo olviden, es más 'pior' todavía. El fracaso de los partidos mayoritarios así lo acredita, por lo que no tiene necesidad de rendirles tributos: el PP mantiene secuestrado al voto de los católicos.

¿Y don José Bono? Bono no mete ninguna de sus extremidades, pero saca los pies del tiesto cuando se cansa de esperar una oportunidad que nunca llega. Entonces se trastorna y habla de la religión universal, que es la religión más particular de todas, un credo hecho a medida del fiel.

A ver si va a resultar que cada pueblo tiene el Gobierno, y los políticos, que se merece, sea éstos de derechas o de izquierdas. Porque tanto la izquierda como la derecha española tienen algo en común: el cainismo. Su enemigo no es el extranjero sino el compatriota. España lleva toda la modernidad envuelta en guerras, pero siempre son guerras civiles.

 

Buitres de allende, cainitas de aquende Tertulia de sobremesa con el presidente de una las grandes empresas españolas vendidas a una multinacional extranjera. O sea, que ya no es española. Le agradezco mucho que me explique las consecuencias de una causa que yo no acierto a resumir (y cuidado que lo intento): "Para que un fondo acepte invertir en España tienes que asegurarle una rentabilidad de entre el 12 y el 19%. De otra forma, te dice que no. Y como pocos pueden ofrecer esa barbaridad, lo que ofrecen es el suicidio". Vamos, que cuando ahora hablamos de fondos, no nos referimos, ni a fondos de inversión ni a fondos de pensiones, sino a las termitas de los fondos de capital-riesgo. Gente con vocación de destruir empresas. Son como buitres que compran el control de una compañía para, cuanto antes, desguazarla –ahora, en la jerga de los mercados, puñeteros mercados financieros, se habla de "filetear" una compañía-. El cáncer del 'private equity' opera bajo un único principio: la suma de las partes vale más que el todo. Entran en una compañía y comienzan a venderla por trozos. Naturalmente, ello conlleva el pequeño detalle de despedir trabajadores para reducir gastos y así poder vender a cinco lo que compraron a tres.

Y junto a los fondos de alto riesgo figuran los 'hedge funds' esos que se han apoderado de las salidas a bolsa y de las ofertas públicas de venta, la función más noble de las bolsas

Naturalmente, el capital-riesgo no expone su dinero sino el dinero de los demás. Son chicos muy listos, todos ellos con MBA e idiomas que piden prestado el dinero para comprar la compañía y tras filetearla, obtienen dinero para pagar al banco y obtener su buen dinero. Una vez destrozada la compañía recogen sus beneficios y se van a 'democratizar' otra compañía.     

Y ojo, porque la función de estos benefactores de la humanidad no sería posible sin la colaboración de empresarios ansiosos por aumentar su poder, que no su productividad. ¿Quieren un ejemplo? Abertis, con la unión del fondo de capital-riesgo CVC y el insigne Florentino Pérez.

Bueno, existe una variante de esta filantrópica actividad: los Pérez de turno, en lugar de aliarse con un fondo de capital-riesgo lo hacen con una multinacional extranjera. Es el caso de Endesa, que ya no crea puestos de trabajo en España, porque la vendieron a la italiana estatal ENEL, para que la familia Entrecanales pudiera acrecentar su fortuna –pobrecillos, pasan apuros para llegar a fin de mes.

Y esto es bello e instructivo porque muchas de estas operaciones buitrescas se realizan según el cainismo español. Quiero decir que el Gobierno patrio apoyó con entusiasmo la operación para fastidiar al "fachas" de Pizarro (como le denominaba Zapatero) y beneficiar al progresista José Manuel Entrecanales –amigo personal del presidente del Gobierno-. Esto es lo que conocemos con el nombre de cainismo español.

Y esperen que el caso Endesa se va a multiplicar por 'n' con la famosa reforma financiera de cajas de ahorros, a las que se va a obligar a vender sus participaciones industriales rápido y mal. Los fondos-buitre están en ello. Esto apúntenlo en el debe del Gobierno, pero en el futuro, se lo apuntarán en el de la oposición pepera. De hecho, en la tarde del viernes, esa cabeza egregia llamada Javier Arenas, sentenció que el problema del PSOE es que ha hecho una reforma financiera –o sea, de cajas- muy tímida. Es decir, que la opción del PP consiste en ampliar y profundizar en la barbaridad del PSOE. Esto marcha.

Que no, que no es que nos tengan manía. La culpa no la tienen los buitres de allende sino los cainitas de aquende.     

Los bancos españoles no son los malos, son los tontos

Ocho bancos han suspendido las pruebas de esfuerzo de la Autoridad Bancaria Europea (ABE), así que la prensa europea aparece coronada por banderas españolas, bandera nefata para la Europa del Euro, bendito euro.  

Es igual que los españoles hayan sometido al examen a todos los bancos y cajas de ahorros, es igual que Elena Salgado –Calamity Helen, como es conocida en Bruselas- haya recordado que ninguno tiene necesidad de nuevos capitales o que el gobernador del Banco de España –calamidad conocida como Miguel Ángel Fernández Ordóñez (MAFO)- recuerde que otros países, por ejemplo Alemania, no se han presentado al examen. Pues mire, doña Elena y don Miguel Ángel, si íbamos a salir mal porque la metodología nos era adversa –y lo era- no haberse presentado. Mismamente lo que hicieron los alemanes

Los bancos españoles son buenos, mejores que los europeos, pero son tontos. Y los más tontos, no están en el sector privado, sino en la Vicepresidencia económica y en el Banco de España.  

Camps debe dimitir, pero…

Francisco Camps debería dimitir, no por corrupto, sino porque hay que ser tonto para montar un escándalo por recibir trajes. Y también debe dimitir por aquello de crear hábito.

Dicho esto y a pesar de que el presidente valenciano me cae gordo, llama la atención que esta chorrada llegue a los tribunales, de los que se han librado el vicepresidente Manuel Chaves, rey de las subvenciones a la familia –a la única familia posible, la suya-, a su sucesor como presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, por fabricar jubilaciones con el dinero de los demás o al nuevo ministro del Interior, Antonio Camacho por evitar una arresto de ETA. Todo ello, por supuesto, presuntamente.  

Obama apoya al Dalai Lama, pero no a lo chinos

Hablando de soberbios, el presidente norteamericano, Barack Obama, mientras impone un ultimátum al Congreso para que accedan a pagar la deuda por él contraída, ha decidido lanzar otra maniobra de prestigio internacional. Recibirá al Dalai Lama, más que nada para demostrar que él es muy capaz de enfrentarse al Régimen chino. Me place, pero mejor que defender a los tibetanos sería que Obama defendiera a los chinos de su propio Régimen de Beijing, la mayor tiranía del mundo.

Pasacalles anticapitalista  

A la Asamblea del 15-M en el madrileño Barrio del Batán (del entorno de clase media-baja) acudieron unas veinte personas. En el cercano Paseo de Extremadura, está previsto para el domingo 17 un "pasacalles anticapitalista", que se anuncia reivindicativo y festivo, porque, se nos informa al respecto, el capitalismo se hunde.

Yo creo que el 15-M se enfrenta a una cierta confusión de conceptos. El capitalismo no se está hundiendo –no caerá esa breva- lo que ocurre es que el capitalismo financiero está hundiendo a la economía, que es distinto. En cualquier caso, el hecho de que se expresen así significa lo que ha degenerado el 15-M. Ya lo único que le queda es algo parecido a la guerrilla urbana: enfrentarse a las fuerzas de la orden.

Eulogio López

eulogio@hispanidad.com