Grande Marlaska confirma en COPE que la situación de alarma se extenderá más allá de quince días: "Es bastante probable"

En la COPE, el ministro del Interior, Fernando Grande Marlaska, ha confirmado que la situación de alarma se extenderá más allá de quince días: “Es bastante razonable y probable que pueda el estado de alarma ser prorrogado más allá de los quince días. Estamos en una situación importante en cuanto a entidad, gravedad y necesidad de asunción de medidas. Pero lo importante es que estamos ya mirando hacia esa curva contagios revierta en los próximos días”.

En Onda Cero, Carlos Alsina opinaba: “Pienso en el debate pendiente que teníamos en España, los Presupuestos que iban a depender de la mesa de negociación y de Esquerra Republicana, el afán de agradar a Oriol Junqueras, todo aquello de hace quince días que hoy parecen quince siglos. Todo se va yendo por el desagüe, y opino que no es malo que algunas se vayan.

Al confinamiento y el final de la epidemia le sucederá un país convaleciente, debilitado por una enfermedad que pegó duro y necesitado de estímulos de todo tipo. No sólo económicos. Requerirá, tanto como ahora, de ideas claras y rumbo firme en el puente de mando. De un gobierno capaz de aunar voluntades y hacer equipo.

Hay que empezar ya a construirlo todo y ha dejado de ser el tipo más influyente de España Oriol Junqueras. Si esto es una guerra, como dice Macron; si hace falta un presupuesto de guerra, entonces sacarlo adelante es misión de todos los grupos parlamentarios. Sobre todo aquellos que representan a un mayor número de españoles y de todo el país. El coronavirus se ha llevado por delante Pedralbes. Esto sí que es un tsunami, y no el tsunami aquel democrátic”.

En Onda Cero, Fernando Ónega señalaba: “A falta de una Unión Europea eficaz, alguien tiene que tomar la iniciativa. Lo que dejan ver las noticias es que hasta ahora se han impuesto las soluciones nacionales y el resto han sido palabras.

Los 300.000 millones de Macron son una cantidad grandiosa, quizá jamás pensada para una crisis sanitaria. El billón en que piensa el FMI desborda cualquier otra previsión. España, al lado de esos volúmenes, hace un pequeño esfuerzo que andará por los 50.000 millones, hoy lo sabremos.

Pero, cuando uno lee en La Razón a Isabel Díaz Ayuso que la caída de contagios tardará todavía un mes, ¿quién se atreve a hacer un cálculo? ¿Quién se atreve a hacerlo también al ver que las pérdidas temporales de empleo por los ERTE se pueden aproximar al millón de personas? En un solo día hablamos de cerca de 50.000.

Y todo eso lo pagarán las arcas públicas. Nos enfrentamos a dos gastos tan inevitables como descomunales: el sanitario, porque como dice Díaz Ayuso, lo primero es la vida. Y el preciso para salvar la economía, que es la inquietud siguiente. Empresas devaluadas en las bolsas, actividad paralizada, malos indicadores generales… Asusta el comienzo del día.

A mí no me dicen mucho los presupuestos que se anuncian. Pueden ser realistas o quedarse en nada. Me importa que haya decisión de los Estados de utilizar todo su poder para garantizar la salud y para contener o aliviar el descalabro de la economía, porque hay muchas cosas en riesgo. Entre ellas, la paz social".

En Onda Cero, Rubén Amón lanzaba sus preguntas: “¿Qué fue de Felipe VI, dónde está el jefe del Estado, dónde se ha metido el Rey? No me refiero a la herencia, sino a su papel patriarcal en la crisis que nos concierne.

Torra da positivo de Coronavirus. ¿En su caso se le confina o se le declara independiente?

No sé cómo inculcar en la opinión pública las medidas para combatir la enfermedad. ¿Me dejas poner una canción, Alsina?

¿Sabías que uno de los mayores problemas del confinamiento doméstico está siendo la violencia familiar y de género?

Que dice Ábalos que va a prorrogarse el estado de alarma. ¿Y por qué no adelantarla al 8 de marzo?

¿Cuándo entenderán los niños en nuestros hogares que una casa es antes un régimen chino que una democracia danesa?

Escenas tragicómicas del coronavirus, ¿Sabías que Daesh ha recomendando a sus terroristas mártires que se abstengan de viajar e Europa?”.

En la SER, José María Izquierdo apuntaba: “Mucho están tardando las autoridades patrias en comunicar a la ciudadanía las medidas económicas para aplacar los gigantescos destrozos que está causando el coronavirus.

Ha caído hasta el abismo la actividad industrial de las grandes empresas, tanto automovilísticas, como aeronáuticas o de cualquier otro tipo, pero los ciudadanos de a pie ven, aterrorizados, como ha desaparecido también su modo de vida más primigenio: el trabajo.

No es fácil saber qué guerras internas se estarán librando en el Gobierno, pero convendría que ahora no nos falle, después de aquel robo a mano armada de 2008, que se llevó por delante el bienestar de miles y miles de familias, sacrificadas en el austericidio europeo, porque entonces la derecha de este país, con los grandes prohombres de la banca mundial al mando de las naves, decidieron que los sacrificios recayeran en los más humildes, que lo importante, dijeron, era salvar el sistema financiero en detrimento de las familias.

Ahora, por favor, no vuelvan a hacer lo mismo. Los ciudadanos no aguantarían un segundo expolio. Tenemos, dicen, un gobierno de izquierdas”.

En la COPE, Jorge Bustos decía: “Esta crisis está desnudando lo peor y lo mejor de todo el mundo, pero de los políticos, que están expuestos al escrutinio, más. Yo creo que el alcalde de Madrid, que en ocasiones no ha seguido siempre la línea de Casado -es decir, ha defendido la cooperación desde el minuto uno, no se ha detenido muchas veces en la crítica, que es legítima por otro lado”, “se pueden criticar los fallos porque esos fallos de los gobiernos ahora cuestan vidas y se deben criticar”, “pero Almeida ha demostrado un liderazgo que está convenciendo a los que le votaron y a los que no, están reconociendo en el alcalde de Madrid un liderazgo moral y también el conocimiento de la ciudad. Cada vez que habla dice algo necesario, con sentido, racional y  tranquiliza a la gente diciéndoles la verdad, porque siempre la tentación es tratar a la gente como si fuera imbécil o Meno de edad. Almeida desde el minuto uno ha dicho la cruz verdad a los madrileños cuando todavía el cierre de Madrid o de los colegios parecía una posibilidad alarmista”.

También en la COPE, Antonio Naranjo opinaba: “Yo creo que sin quitarle méritos (a Almeida), esto me recuerda lo que decía Erasmo, que en el país de los ciegos, el tuerto es el rey. El problema es que estas situaciones retratan muy bien a la clase política y probablemente a la sociedad que tenemos. En ambos casos, afectadas por un cierto infantilismo y hacen que decir ls cosas normales resulte revolucionario. Aquí lo que nos hacen falta son personas como el doctor House, el de la serie, que te coja del brazo y te diga: esto que te pasa es muy grave, perorara sacarte adelante tengo que hacer esto. Y esto que es muy simple se llama la verdad. Y la verdad está muy infravalorada por los políticos pero también por los ciudadanos, que no quieren oírla, quieren oír muchas veces un placebo que coincida con sus prejuicios ideológicos o con sus necesidades y eso retroalimenta a una clase política que no la dice habitualmente. Y en ese escenario, decir cositas tan normales como las que ha dicho Almeida se convierte en algo maravilloso. Pero tenemos que hacer una reflexión colectiva de si los políticos no son el espejo de la sociedad”.

En la COPE, Jorge Vilches opinaba: “Hay una cosa que me preocupa y es que estamos muchos confinados en casa desde hace mucho tiempo y tratamos de convertir nuestra casa en un hogar en el que vivir todos estos días. Pero hay gente que no está en esas circunstancias y evidentemente creo que necesitamos que exista ahora mismo un servicio de psicología y para toda esta gente que está encerrada y le cuesta sobrellevarlo y se frustra o tiene ansiedad, y que necesita ayuda, no solo ahora sino cuando pase este confinamiento”. “También me preocupa lo lento que es este Gobierno, es decir, han tenido que ser algunas administraciones locales o autonómicas, como la de Madrid,  la que se adelante no solo a tomar medidas de cierre”. “Me inquieta la inacción de este Gobierno y que luego no se amplíe el servicio médico a la psicología”.

José Antonio Álvarez Gundín decía: “Se presenta una jornada por un lado muy interesante y muy necesaria por las medidas económicas que va a adoptar el Consejo de Ministros. Y por otra parte se presenta un día largo, un día que de momento se está encajando razonablemente bien pero que intuimos que  se va a hacer muy duro, porque esto no va para quince días, esto va para un mes, y esto hay que mentalizarse y sobre todo organizarse, planificar el día a día, establecer una rutina activa, saber que habrá momentos difíciles, ponerse una disciplina y reservarse un tiempo para cada uno”.