Tras la condena del Tribunal Supremo, Fernando Grande Marlaska, ministro del Interior, se ha trasladado hasta Innsbruck, Austria, en donde ha expresado hoy la “voluntad real” de cumplir con la sentencia emitida por el Tribunal Supremo. Asimismo, ha afirmado que “el actual Gobierno la recibe como todas las resoluciones judiciales, con el respeto consideración y voluntad real de cumplirla”, según EFE.

La institución condenó a España por no cumplir el compromiso con los refugiados en el que se involucró en 2015. Según el plan, el país debía acoger a 19.445 refugiados llegados de Italia y Grecia. Sin embargo, tan solo recibió a 2.500 entre 2015 y 2017, es decir, a un 12,85% de lo acordado.

Este es el primer caso en el que se condena a un Estado miembro por incumplir las normas comunitarias, en esta ocasión, de carácter “vinculante y obligatorio”. Como respuesta, el Gobierno español deberá tramitar el 87% de las solicitudes restantes. Pero el ministro Marlaska lo ha prometido.