Según informa la consultora Laborde Marcet, los cambios en las preferencias inmobiliarias de las empresas tras el confinamiento se empiezan a notar en el mercado de oficinas y de locales comerciales. El 'flagship' es el nuevo modelo en ambos segmentos en las grandes ciudades españolas debido a las nuevas tendencias en la forma de trabajar y de consumir de la sociedad española.

Miquel Laborde y Gerard Marcet, socios fundadores de la consultora Laborde Marcet, subrayan la importancia de la rápida adaptación del mercado a la nueva coyuntura: “Tanto propietarios como empresas se han dado cuenta de que hay ciertos cambios intrínsecos a la realidad empresarial y social que vivimos que van a ser relevantes. El mercado ha dado un paso de gigante en muy poco tiempo, y las tendencias que se preveían para dentro de 5 o 10 años, son una necesidad real a día de hoy”.

Según los datos de la consultora, el verano está generando movimiento por el cierre de negocios y la apertura de otros. Los activos inmobiliarios en buenas ubicaciones o posiciones estratégicas han experimentado ligeras correcciones de precio tras el confinamiento, aunque no se esperan grandes descuentos en el medio plazo. En el corto plazo sí que habrá grandes bajadas en segundas y terceras líneas, porque habrá una desocupación importante de locales comerciales. Los fondos, family offices e inversores privados ya vuelven a estar en búsqueda de bienes inmuebles con presupuestos de a partir del millón de euros para activos de retail y que superan los 20 millones para la compra de hoteles y edificios en zonas prime.