El papel del expresidente español José Luis Rodríguez Zapatero en Venezuela, apoyando a una cruel dictadura comunista, es un misterio que algún día habrá de ser revelado: esperemos que Iker Jiménez nos dé esa alegría alguna vez. 

Según informa este miércoles El Mundo, Zapatero está presionando al izquierdista Grupo de Puebla para que no exija la entrega de las actas de las elecciones del pasado 28 de julio y de esa manera "no hacer el juego a la oposición" venezolana. 

Recordemos que el comunista Grupo de Puebla recomendó que «el Consejo Nacional Electoral (venezolano), como han sugerido el secretario general de la ONU y el Centro Carter, asegurase la transparencia del proceso electoral publicando la totalidad de las actas de escrutinio, desagregadas por centros y mesas de votación». 

Pero eso a Zapatero no le parece bien. El apoyo del expresidente socialista a Maduro le hizo exclamar al expresidente de la Comunidad de Madrid y también socialista Joaquín Leguina que "es imbécil”, (una opinión bastante generalizada en España, por cierto). 

Y a otros dirigentes históricos del PSOE tampoco les ha gustado. Por ejemplo, a Felipe González, que le ha reprochado a ZP que sea el único integrante del Grupo de Puebla que no pide transparencia. 

Volviendo a Venezuela, agentes de la dictadura de Nicolás Maduro han secuestrado a María Oropeza, una coordinadora regional del partido de María Corina Machado:

Así lo ha denunciado la misma Corina Machado: 

Mientras, el Gobierno de Chile no reconoce al opositor Edmundo González como ganador de las elecciones de Venezuela para no repetir "la experiencia" de Juan Guaidó,  autoproclamado como presidente en 2019 y reconocido por parte de la comunidad internacional, incluida la UE. Según ha explicado el ministro chileno de Exteriores, Alberto van Klaveren, "los países que han reconocido como presidente electo a Edmundo González son muy pocos" y "la mayoría" ha optado por no reconocerle ni a él ni a Maduro. Eso sí: todos opinan que "la probabilidad de fraude es muy alta". "Pero de eso no hay que concluir que podamos reconocer a González. 

El presidente chileno Gabriel Boric había exigido "total transparencia de las actas y el proceso, y que verificadores internacionales no comprometidos con el gobierno den cuenta de la veracidad de los resultados". Desde Chile no reconoceremos ningún resultado que no sea verificable".

En ese sentido, desde EEUU opinan que “sería casi imposible falsificar las actas” publicadas por la oposición. 

Mientras el presidente de la OEA, Luis Almagro, pidió el fin de la persecución política en Venezuela: “Esta irracionalidad represiva debe ser detenida ya”.