Viktor Orban, primer ministro de Hungría y Mateusz Morawiecki, primer ministro de Polonia
Es por todos conocido que Polonia y Hungría están mal vistas en Bruselas: entiéndanlo, defienden su Constitución sobre la europea y su soberanía, no están dispuestos a dejar que los niños y jóvenes sean adoctrinados, defienden la vida y la familia y son fieles a sus principios cristianos. Nada de esto gusta a Bruselas. El Nuevo Orden Mundial imperante en una Europa decadente ha conseguido que todo lo católico se convierta en ultra y fascista, y los únicos que mantienen los verdaderos valores europeos, los valores cristianos, son Hungría y Polonia. Y resulta que los 'fascistas' Polonia y Hungría... son las mejores economías europeas, todo ello sin fondos europeos.
Los medios de comunicación manipulan constantemente presentando a los “ultraconservadores” gobiernos húngaro y polaco como unas fieras salvajes, que van en contra de los derechos humanos y del progresismo. ¿Recuerdan la cumbre de la OTAN? Se reúnen todos los líderes mundiales en medio de un momento de guerra, ¿y cuál fue la noticia? El 'homófobo' primer ministro húngaro Orbán junto al marido del primer ministro de Luxemburgo. Los ataques desde radio, televisión, prensa escrita y redes sociales han sido constantes, los propios políticos han atacado duramente a ambos países. ¿El resultado?
ElectoPanel de Electomanía: ¿a qué país expulsarían los españoles de la UE si tuvieran que elegir uno? El 41,7% expulsarían a Hungría, el 10,8% a Francia y el 9,4% a Polonia, como si los pobres húngaros y polacos nos hubieran hecho algo malo. Hay que recordar que, en esta guerra entre Ucrania y Rusia, en la que todos nos hemos vuelto tan solidarios, Hungría y Polonia son los países que más refugiados ucranianos han acogido. Pero eso da igual, son homófobos, xenófobos y racistas, o al menos eso dicen en televisión, y Juan Español se lo cree, evidentemente.