Guillermo Lasso, disolvió el legislativo y convocó elecciones el pasado 17 de mayo para defenderse de una maniobra de sus opositores de izquierdas que pretendían inculparle en un caso de presunta corrupción que fue desmentido incluso por el comité de supervisión de la Asamblea Nacional
Como informó Hispanidad en mayo de este año, el ya expresidente de Ecuador, Guillermo Lasso, se defendió de los izquierdistas, que pretendían destituirlo bajo la acusación de supuesta corrupción, con la convocatoria de elecciones. Para ello, Lasso recurrió a la ‘muerte cruzada’, un procedimiento por el que puede disolver el Legislativo y celebrar elecciones generales anticipadas. Así eludió ser destituido por la oposición mayoritaria en un juicio político.
Esas elecciones generales anticipadas se llevaron a cabo el pasado 15 de octubre, de las que resultó elegido Daniel Noboa ('Acción Democrática Nacional', centroizquierda), que gobernará un año y medio hasta completar el período de mandato que termina en mayo del 2025.
Además, de esos comicios también salió un Legislativo en el que la mayoría el bloque de la 'Revolución Ciudadana', del expresidente Rafael Correa, quien mantuvo un enfrentamiento con el Ejecutivo de Lasso durante toda la legislatura.
Y es ese bloque ‘correísta’ el que ahora quiere reanudar el juicio político contra Lasso, recoge Infobae.
El proceso de destitución a Lasso, al darse con posterioridad a su salida de la Presidencia, es de orden político y sin que pueda tener consecuencias respecto del cargo que ya cedió. Se podría conocer el resultado en un plazo de cinco días.
Para censurar a Lasso, se requieren 92 votos de los 137 votos de los miembros de la Asamblea.
Lasso -quien en su último día como presidente dijo que “disolver la Asamblea fue una decisión política acertada que recibió el respaldo de más del 70% de la población”- siempre ha sostenido que no hay pruebas de su presunta corrupción.