Un año atrás, en esta misma festividad de San Juan Pablo II, el hombre del siglo XX, hablaba de los logros del tercer Papado más longevo de la historia: el catecismo de 1992, la teología del cuerpo, la justicia social, con la culminación de la magna obra de la Doctrina Social de la Iglesia, destrucción el comunismo y resucitar el concepto de guerra justa e incluir la injerencia humanitaria como nuevo capítulo de la legalidad internacional... entre otros. 

Por todo ello y por más, en este aniversario 2025, nuestro corresponsal Jaime Fomperosa nos recuerda, indirectamente, las profecías de Garabandal, conocidas justo el día en que se anunció la muerte de San Juan XXIII. La entonces niña Conchita dijo esto: 

-Entonces quedan tres papas. Bueno, cuatro, me ha dicho la Virgen, aunque uno no cuenta.

Su madre inquirió:

-¿Y luego el fin del mundo?

-No -respondió la niña- la Virgen no me dijo que luego vendría el fin del mundo sino el fin de los tiempos.

Garabandal no es una broma. En estas apariciones de la Madre de Dios en San Sebastián de Garabandal, pequeña aldea de Cantabria (1961-1965), creyeron San Pablo VI, El Padre Pío y Santa Teresa de Calcuta. Quizás por ello, muchos cristianos bien formados insisten en que el último Papa fue Benedicto XVI. ¿Significa esto que Francisco Francisco y León XIV son papas falsos? De ningún modo: son dos pontífices totalmente legítimos y con grandes virtudes, lo que significa es que la Gran Tribulación no va a llegar sino que... ya llevamos 14 años viviendo en la GT (Gran Tribulación). Y como otro profeta anunció, durante la Gran Tribulación viviréis entre demonios. Bueno, ya casi lo tenemos. 

Feliz día de San Juan Pablo II, que era un tipo siempre sonriente. Así que tranquilos y a repetir el lema de Santa Faustina Kowalska, la mística del siglo XX a quien Karol Wojtyla del interdicto eclesiástico, prohibidos, luego canonizó y luego creó la Festividad de la Divina Misericordia: "Jesús, en Vos Confío”.