- Habrá que insistir: la marginada no es la mujer, sino la madre.
- Y el feminismo colabora a esa marginación con su obsesión antimaternal.
- La mujer que no es madre no tiene por qué quejarse de nada.
- Y en concreto: ¿las feministas no se cansan de quejarse?
Le dije "buenos días" a una feminista. El juicio es el lunes. Es la meme que circula por Internet. Otro acierto de talento.
Y luego vienen los asombros: a pesar de que la mayoría de los jóvenes dicen trabajar por la igualdad
sólo 4 de cada 10 chicas se consideran feministas y sólo dos de cada 10 varones.
Lo único que falla en esta solemne declaración de un telediario es el "a pesar de". ¿Qué tendrá que ver estar a favor de la igualdad de derechos con convertirse en 'cuñada feminista', como diría el recientemente fallecido Forges?
Habrá que insistir:
la marginada no es la mujer, sino la madre.
Y el feminismo colabora a esa marginación con su obsesión antimaternal
La mujer que no es madre no tiene por qué quejarse de nada.
Y hablando de quejas: ¿las feministas no se cansan de quejarse?
Eulogio López
eulogio@hispanidad.com