• Hortera es aquel que se preocupa más de la forma que del fondo.
  • Y que está más pendiente de los gestos que de las esencias.
  • Como los españoles de ahora mismo.
  • Y no lo duden: volveremos a tropezar en la misma piedra… horteril.
  • No es una cuestión de gustos. Lo que ocurre es que hemos degenerado y ahora nos gusta el feísmo.
  • Y cantamos, otra vez, en inglés. ¡Hay que ser catetos!
  • En plata: los españoles nos estamos haciendo unas nenazas de mucho preocupar. Por eso pintamos tan poco en  Eurovisión… y en el mundo.
No estoy de acuerdo con quienes desprecian el festival de Eurovisión, pero sí con los que lo critican. No desprecio un festival que mueve a millones de personas de todo el continente desde hace décadas. Y si Portugal ganó el sábado es porque, en medio de la mentecatez habitual en la progresía, que ha inundado el festival de majadería políticamente correcta, todavía la gente distingue cuándo una melodía agrada. Y si España quedó la última es porque somos unos horteras, que presentamos una canción intatareable, verdaderamente mala y estúpida. No, no es una cuestión de gustos. Lo que ocurre es que hemos degenerado y ahora nos gusta el feísmo y por eso queremos ensalzar a cursis blanditos, como Manel Navarro. Recuerda aquello de "sobre gustos no hay mucho escrito pero lo poco que hay escrito nadie lo lee". "Me llevo una experiencia única pero al final no pudo ser". ¿No pudo ser el qué, campeón? Que has quedado el último, Manel, que has hecho el ridi, que si la gente te votó para acudir (de aquella manera que todos sabemos cómo funciona esto) esa misma gente, sólo que en toda Europa, no te ha votado para subir al podio y te ha ubicado en el furgón de cola. ¿Haces el ridículo y sigues bravucón? No te elegimos para que tuvieras "una experiencia" sino para que representaras a un país. No era un premio, campeón, era un compromiso. España ha quedado última porque somos unos horteras. Una de las características del hortera es que se preocupa más de la forma que del fondo (es decir, de la canción, que de un concurso musical estamos hablando) y de los gestos que de la esencia. Justo lo contrario que Portugal, ganadora del certamen. En plata: los españoles nos estamos haciendo unas nenazas de mucho preocupar. Por eso pintamos tan poco en Eurovisión… y en el mundo. Y encima cantamos en ingles una vez más. ¡Mira que somos catetos! Eulogio López eulogio@hispanidad.com