Lola Delgado, que en su día llamó “maricón” al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, considera que hay que erradicar las señales de tráfico machistas, y ha puesto manos a la obra a la Fiscalía General del Estado, que dirige.

Menos mal, porque es intolerable que, por ejemplo, los pasos de peatones se representen con la figura de un hombre y no de una mujer, o que la señal que indica la cercanía de un centro escolar sea un niño llevando de la mano a una niña, que va detrás.

Y esta tontuna nos puede salir muy cara, como se pongan a cambiar señales. Pero los principios son lo primero.

Ser fiscal para esto…