El pasado 20 de marzo leía un comunicado de prensa titulado "'Papa en vez de Champions League'.
UGT denuncia la excesiva cobertura del Cónclave por parte de RNE: Es el púlpito particular de Rouco Varela'".
La cobertura del Cónclave para la elección del nuevo Papa ha sido la gota que ha colmado el vaso.
UGT denuncia que ha permitido que RNE se convirtiera en el púlpito particular de Rouco Varela y señala la incompatibilidad de estas prácticas con la Constitución en la que se define a España como estado no confesional.
Por último, concluyen: "Desde el horror por lo que está ocurriendo, UGT reitera nuevamente la petición de dimisión del actual responsable de Radio Nacional de España, porque con su gestión se esta cargando los 75 años de historia de la Radio Pública en este país".
Pensaba que UGT era un sindicato que tiene por objetivo defender a los trabajadores, pero no que era una plataforma política promotora de un laicismo radical.
Por favor, Sr. de UGT, tenemos seis millones de parados y no negarán que informar en el momento en que se produce una "fumata blanca" no es una noticia de calado internacional como para que la radio dedique un espacio suficiente en un país de amplia mayoría católica.
Suso do Madrid