Al finalizar su presentación junto a Nobuo Tanaka, el secretario de Estado de Energía, Pedro Marín inició una huída perseguido por los medios al estilo Belén Esteban. No había habido posibilidad de preguntas y la prensa se quedó con ganas de saber cosas importantes. Marín respondió de mala gana y con vaguedades.
Afirmó que entre el Gobierno y el Partido Popular hay un claro acuerdo en que la evolución de los precios de la energía debe trasladarse a los precios finales de la Tarifa de Último Recurso (TUR). Así que la situación es la siguiente: el Gobierno no se atreve a retirar las subvenciones que encarecen el precio de la luz, el déficit tarifario se incrementa exponencialmente, el PP y el Gobierno acuerdan trasladar a la tarifa de último recurso (TUR) el resultado de la subasta que mañana fijará el coste de la energía. Pero ese es sólo uno de los componentes en el precio de la luz y la subida puede ser insignificante. De hecho, si hubiera que trasladar de verdad el déficit a los precios, Industria calcula en un informe difundido por error que el incremento del precio iría del 40 al 56%.
Mariano Tomás
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