Explican la enseñanza del Magisterio sobre las obligaciones de los católicos a la hora de emitir su voto

 

La defensa de la vida prevalece sobre otras cuestiones sociales. Ya negaron la comunión a John Kerry, candidato a la Casa Blanca o a Nancy Pelosi, presidenta de la Cámara de Representantes por su posición en favor del aborto.

Estados Unidos tiene elecciones el 2 de noviembre. En ellas, se renovarán los 435 escaños de las Cámara de Representantes y un tercio del Senado, además de que serán elegidos 38 gobernadores y 46 estados celebrarán elecciones legislativas estatales. Mientras toda la atención se centra en algunos Estados por su apoyo o no a las leyes de inmigración (casos de Arizona, Nuevo México o Nebraska) o sobre el auge del Tea Party, otro de los focos de atención, aunque pase menos desapercibido para la opinión pública europea, es la lucha por el voto católico.

Estados Unidos es un país donde la defensa de la vida prevalece sobre otras cuestiones sociales, por lo que la postura de los candidatos en esos temas es decisiva para inclinar la balanza hacia uno u otro. Es por eso que los obispos norteamericanos han hablado con insistencia en las últimas semanas sobre las obligaciones del católico a la hora de votar. En ellas animan a votar por los candidatos que defiendan la vida y considerar como menos aceptables a quienes respalden el aborto, la eutanasia o la investigación con células madre embrionarias. En este sentido se han expresado los obispos de Nueva York, Buffalo, Iowa, Minnesota.

Los obispos de Estados Unidos se han mostrado siempre muy tajantes a la hora de mostrar la enseñanza del Magisterio de la Iglesia en temas como la defensa de la vida y ya ha habido varios políticos católicos a los que se ha negado la comunión por su postura en favor del aborto, como fueron los casos de John Kerry o Nancy Pelosi. Además, el obispo Chaput, de Denver, invitó al actual vice-presidente de abstenerse de comulgar, por su posición pro-choice.

Por lo tanto, los obispos se mantienen fieles a las enseñanzas de la Iglesia y así las muestran a los más de 70 millones de católicos que viven en los Estados Unidos, de los que la mayoría tendrá que votar en las próximas fechas.

Juan María Piñero

juanmaria@hispanidad.com