Hace unos días había escrito "Claridad cuanto antes". Nuestros bancos evidentemente no necesitan dinero para ese rescate y Hollande nos hizo un flaco favor con sus declaraciones.
Pero la tercera revisión al alza del déficit de 2011 por los incumplimientos de las Comunidades Autónomas nos hace daño, como nos hace daño que nos envíen funcionarios de Eurostat para revisar las cuentas. La dosificación de las malas noticias que sigue haciendo el Gobierno no nos sienta nada bien. Rajoy, antes de reunirse con Merkel, decía que no le iba a pedir nada a la Canciller alemana porque estamos haciendo bien los deberes.
Pero no es bueno que los problemas de consolidación fiscal y de nuestro sistema financiero se vayan conociendo por capítulos, estamos sufriendo los resultados. Y desde luego que España necesita algo muy importante de Merkel. La Canciller es la única que puede cambiar la política del Banco Central Europeo, apoyando la compra de deuda. Y eso es justo lo que necesitamos en este momento. La compra de deuda supone tiempo para hacer los ajustes y las reformas necesarias. Otra cosa es que Rajoy pueda reconocerlo en público. Sin un mensaje más claro y sin apoyo de Europa podemos tener una nueva semana negra en los mercados. Después del falso rescate o rescate solo de los bancos, nos preguntamos ¿Será suficiente?
Xus D Madrid